YO ES pisar junio y empezar a pensar en terrazas, verbenas y celebraciones varias, aunque después me doy de bruces con la realidad, viéndome paraguas en mano y mirando la gabardina de reojo. También es cierto que cuando, de verdad, uno quiere festejar poco importa si llueve o hace sol. Hay menesteres que prestan de una u otra forma. Es el caso de la lectura, que tanto da disfrutarla con sofá y manda que sobre el césped de cualquier parque de los nuestros, que tenemos muchos y muy buenos.
Les cuento esto porque el viernes se celebró en Santiago la XI Xornada dos Clubs de Lectura, que cada año organiza la Consellería de Educación en colaboración con el Centro Autonómico de Formación e Innovación y los centros de enseñanza. Participaron cerca de 250 docentes, entre ellos el lalinense Carlos Negro. El también poeta recibió de manos del conselleiro, Román Rodríguez, el premio Clubs de Lectura 2018 por ser el autor gallego más leído por las lectoras y lectores que formaron parte de los clubes el pasado curso escolar. Negro se suma así a la lista de otros escritores galardonados como Agustín Fernández Paz, Ledicia Costas y Miguelanxo Prado. Así que, desde aquí, mis felicitaciones para el recién premiado.
Tampoco quisiera olvidarme de hacer llegar mis parabienes a la conselleira do Mar, Rosa Quintana, y a su compañero de partido, el portavoz del grupo municipal del PP de Lalín, José Crespo, que estuvieron de cumpleaños hace unos días. Antes de nada, vayan por delante mis disculpas por haberme olvidado de mandarles un saludo el propio día, pero como suele decirse, lo que importa es la intención. Y la mía, siempre es muy buena. Estoy segura de que sabrán perdonarme el despiste. Espero que hayan celebrado como se merecen, aunque el tiempo, o el ánimo, no acompañen mucho últimamente.
