SIEMPRE HE sido una enamorada del cine. Del de verdad, no del comercial. Aunque Pretty Woman me gustó muchísimo y me reí demasiado con la de 8 apellidos vascos. Pero os lo digo de verdad, que yo tengo un ojo crítico para este arte. Lo del cine es lo mío.
Tanto me gusta que esta semana poco me falta para mudarme a Bueu. Y es que esta semana están celebrando el Festival Internacional de Curtametraxes. Y ojo, que los buenenses no se quedan solo con eso de emitir unos cuantos cortos para llamar festival a unas pocas proyecciones. Estos morracenses se lo curran de verdad. Tanto tanto, que hasta Radio 3 les está dedicando una programa esta semana. Y claro, detrás del micrófono esta mi ídolo Javier Tolentino, que es un artista de las palabras.
Y yo estoy que no me quiero perder nada. Así que ya me veis a mí el sábado pasado, casi 45 minutos antes, esperando en la puerta del Museo Massó para ver el encuentro con el actor Antonio Durán, probablemente lo conozcáis mejor por Morris. ¡Y que bien hice! ¡Cómo me gustó!
Bueno, y eso el sábado, porque el lunes ya estaba ahí después de comer para tomarme un café con Oscar del Toro e ir a los encuentros con los cineastas antes de la Sección Oficial.
Me he hecho hasta un planning. Y entre tanto corto, tanto encuentro y tanta charla siempre me entra el hambre. Y menos mal que los de FicBueu piensan en todo... que se han hecho la Ruta das Tapas 5 Estrelas para que los cinéfilos falémicos como yo podamos engordar a gusto entre filme y charla.
Pero por mucho que me pierda el cine, no hace que me olvide del mundo real y este lunes fue el cumpleaños de uno de los grandes, el alcalde de Cuntis. Mi queridísimo Manuel Campos Velay. ¡Felices 44, alcalde!
