Otras empresas esperan el momento de abrir en Pontevedra. De este modo, siete multinacionales esperan poder implantarse en la ciudad con la ampliación del polígono de O Vao, un proyecto impulsado por la inmobiliaria Ponteno que tiene ya 18 años en los que se han sucedido los trámites burocráticos para poder llevar a cabo la obra, que costará entre 10 y 12 millones de euros, según indicaba a este periódico la propia promotora.
La cadena francesa de ropa y material deportivo Decathlon es una de las interesadas en implantarse en el polígono y tiene un acuerdo firmado con la mencionada inmobiliaria. Por otra parte, quieren instalarse en Pontevedra la multinacional danesa JYSK, dedicada al sector de los muebles; Norauto, relacionada con el sector de la automoción; Leroy Melin, comercio dedicado a los productos de bricolaje; el gigante de la comida rápida McDonalds; la cadena de supermercados Eroski-Vegalsa y, por último, la empresa dedicada a la venta de productos para mascotas Tiendanimal.
Todas ellas tienen un precontrato con Ponteno para instalarse en el futuro polígono aunque no se sabe cómo afectarán a los acuerdos (de los que no se conocen los detalles) los retrasos provocados por una farragosa tramitación del proyecto. En este momento, la inmobiliaria debe subsanar un informe desfavorable de Augas de Galicia para que la Xunta dé el visto bueno a la iniciativa. Así, a día de hoy no existen plazos para en inicio de las obras.
Además, en 2020 entra en juego la pandemia y la crisis económica que acarrea, que puede ser también un factor determinante en lo que se refiere al fututo del polígono y las empresas que se asienten en el mismo.
Según la promotora de la obra, la puesta en marcha de las nuevas parcelas del polígono de O Vao generará 230 puestos de trabajo, de los cuales 190 serán directos y otros 40 indirectos, relacionados con servicios de mantenimiento, limpieza o seguridad en las instalaciones, así como servicios auxiliares como el transporte de mercancías.
