Denuncian que Unísono no devuelve los salarios tras el paro de actividad por un positivo

La empresa, en la que trabajan alrededor de 900 personas, paralizó su actividad tras varias denuncias de Inspección de Trabajo, ya que tras detectar un caso positivo entre sus trabajadores no impuso cuarentena preventiva ni desalojó el centro
Instalaciones de Unísono en Vigo. GOOGLEMAPS
photo_camera Instalaciones de Unísono en Vigo. GOOGLEMAPS

El Comité de Empresa de Unísono ha denunciado este miércoles en Vigo que la compañía, pese a no garantizar la seguridad de sus trabajadores en los primeros momentos de la pandemia del coronavirus, se niega ahora a devolverles el dinero que les descontó de la nómina de abril por no acudir a su punto de trabajo ante el serio peligro de contagio.

Según ha informado la CIG en un comunicado, el comité ha calificado de "ruin" la actuación de la empresa y ha recordado que el pasado 18 de marzo se vio obligado a paralizar legalmente la actividad en las plataformas de Vigo ante la falta de medidas adoptadas por la empresa tras la confirmación de un positivo entre los trabajadores. Explica, además, que los descuentos no fueron para todo el personal que secundó la paralización y temen que se trate de una estrategia.

El comité asegura haber intentado por todos los medios que la empresa no descontase los días no trabajados de los salarios, ya que la ausencia de los trabajadores está respaldada por la Ley de prevención de Riesgos Laborales, pero Unísono se ha negado a pagar y ha aplazado al comité a verse en los juzgados.

"Con esta decisión", dice el comunicado, "la empresa evidencia que su única preocupación durante la emergencia sanitaria fue ganar dinero a costa de la salud de su personal". Por ello, los sindicatos con representación en el Comité de Empresa: CIG, CGT y UGT, están estudiando con sus asesorías jurídicas las posibles acciones legales contra la empresa, además de planificar movilizaciones ante lo que consideran "un claro caso de represión sindical".

Unas 900 personas trabajaban entonces en los tres centros de Unísono en la ciudad de Vigo incumpliendo por mucho la distancia social requerida por el Ministerio de Sanidad y compartiendo puestos de trabajo sin que la empresa los desinfectase entre turnos. Fue en ese contexto que la empresa comunicó el positivo de un trabajador "sin ordenar el desalojo del centro de trabajo ni mandar a cuarentena preventiva a las personas con contacto directo", continuando la actividad en las mismas condiciones.

Tras pedir a Unísono que tomase medidas y tras varias denuncias en Inspección de Trabajo ante su pasividad, el Comité de Empresa "se vio en la obligación" de paralizar la actividad "para garantizar la salud de todas las personas".

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