La División de Honor Plata está en un punto en el que fallar puede ser casi mortal por lo que la presión por sumar de dos en dos y conseguir el máximo posible de puntos es alta, pero lo es más si dos de esos cuatro puntos que todavía quedan por disputarse te los tienes que jugar en un derbi, con toda la carga emocional que ello acarrea.
Este sábado el Pabellón Municipal de Pontevedra (19.00 horas) será el escenario del segundo, y último, derbi de la temporada entre la SD Teucro y el Disiclín Balonmán Lalín, donde hay en juego mucho más que dos puntos, de cara a la pelea a vida o muerte de la segunda fase de la competición.
Ambos conjuntos llegan a este encuentro con posibilidades matemáticas, pese a que son casi inexistentes, de clasificarse para el grupo que da opción a la pelea por el ascenso. Ninguno de los dos depende de sí mismo, pero un tropiezo de Ibiza y Sporting Alicante, podría dar ciertas esperanzas al que consiga esta tarde la victoria en el derbi pontevedrés.
Sin embargo, el hecho de conseguir un triunfo en la tarde de este sábado es todavía más importante si se tiene en cuenta que, casi al 100%, ambos estarán en el grupo que peleará por la permanencia y que los puntos que se arrastren de la primera serán fundamentales para mantener la categoría.
En la primera vuelta el Teucro consiguió, sobre la pista del Lalín Arena, su primera victoria del curso y esta tarde los de la comarca de O Deza buscarán una revancha de ese partido, en un duelo decisivo al que ambos llegan con algún cambio en relación al encuentro de la primera vuelta.
Desde el pasado 24 de noviembre el Teucro ha perdido a Ángel Iglesias, que finalizó contrato; y a Marko Dzokic, por lesión, mientras que el conjunto de Pablo Cacheda reforzó su portería con Tomás Villarroel y se hizo con los servicios del lateral izquierdo, Agustín Franco.
Se conocen, se respetan y a lo largo de la historia Teucro y Lalín han sido equipos con mucho en común, con jugadores que han vestido las dos camisetas, clubes de dos lugares que desprenden balonmano por los cuatro polos y de donde han salido grandes nombres. Equipos con historia, con vinculación, pero que esta tarde pelearán hasta la bocina final por dos puntos que pueden suponer media salvación.
En relación a si la plantilla peca de ansiedad por puntuar y por ello falla, el jugador teucrista destacó que "más que ansiedad, lo llamaría ambición de hacer las cosas bien y que todo vaya hacia arriba. Nos ponemos esa presión a nosotros mismos":
Modelo de juego
Con respecto a los cambios en ambas plantillas desde el primer derbi, el extremo considera que es cierto que su equipo perdió a piezas clave, pero que "el resto de compañeros están ahí y pueden aportar". Sin embargo, y pese a las bajas, Remeseiro asegura que el modelo de juego teucrista está marcado y que "todos tienen claro lo que tienen que hacer en cada momento y no creo que los cambios en los dos equipos nos tengan que influenciar".
Por último, el extremo asturiano reconoce que el equipo echa de menos el público en las grandes, "pese a que se suele decir que es una afición fría". Sin duda Remeseiro asegura que "el balonmano es distinto sin público y más en un derbi".
Lalín: Villarroel, Ramón Gil, Crespo, Losón, Bruno, Jorge López, Tate, Porto, Rubén Fernández, Román, Dacosta, Iago González; Roberto Álvarez, Toimil y Aser Pereira.
Árbitros: Fernández Herrero y Rodríguez Valdés.
Estadio: Pabellón Municipal Hora: 19.00 h