DIARIO DE UN CONFINADO

Mi tabla de ejercicios

Imagen de archivo de Rodrigo Cota haciendo ejercicio durante su reto de adelgazamiento. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera Imagen de archivo de Rodrigo Cota haciendo ejercicio durante su reto de adelgazamiento. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

9:30
Me levanto con ganas. He decidido poner en marcha una tabla de ejercicios para mantener la forma, que es algo que recomiendo a todo el mundo. La buena forma física, eso lo sabemos desde siempre, mantiene la mente despejada. Mens sana in corpore sano. Hoy toca empezar con unas flexiones, pero primero me hago un desayuno sólido para tener energía. Café con leche, una tostada con mermelada, que es mi gran descubrimiento de esta cuarentena, y un huevo frito. Le dejo aquí mi receta del huevo frito. Dificultad: alta. Ingredientes: un huevo y sal. Preparación: fría un huevo, póngale sal y cómaselo.


10:00
Comienzo mi tabla gimnástica con veinte flexiones. Me tumbo con las puntas de los pies y las palmas de las manos apoyadas sobre el suelo. Intento levantar mi cuerpo. No puedo. ¿Habré desayunado mucho? Llevo un huevo en el estómago, pienso, pero aún así no entiendo qué sucede. Recuerdo que en mi infancia algunas veces me obligaban a hacer flexiones y se me daba razonablemente bien. Tras varios intentos en los que pongo todo mi empeño y toda mi fuerza, no consigo levantar ni medio milímetro. Desisto, y es entonces cuando comprendo la verdadera dimensión del problema, pues ya no es que sea incapaz de hacer una flexión, sino que no puedo levantarme. Lo intento de diversas maneras, todas ellas infructuosas. Consigo sentarme, pero al no tener un punto de apoyo no veo manera de ponerme en pie. Pienso en pedir auxilio a mi señora o a mi hijo, pero uno tiene una dignidad, aunque sea poca, así que tal como estoy, sentado, voy avanzando hasta alcanzar una silla. Ahí sí lo logro. Me apoyo y escalo hasta lograr sentarme sobre la silla y consigo finalmente ponerme en pie. No fue una buena idea. Nunca jamás lo intentaré de nuevo. Prefiero tener una mens insana en un corpore insano que jugarme la vida sometiéndome a un sobresfuerzo innecesario e inútil.


12:00
Veo que se amplía el estado de alarma otras dos semanas. Imagino que a estas alturas todos y todas contábamos con ello. Paso un rato viendo la intervención de Sánchez. Qué guapo es. Qué bien habla el condenado.


13:00
Pienso en la cantidad de cosas que no echo de menos. Ése sí es un buen ejercicio, el de pensar en cosas innecesarias sin las que podemos pasar perfectamente. Tomar una caña en una terraza, por ejemplo. Cierto que en cuanto esto acabe será una de las primeras cosas que haga, por solidaridad con los hosteleros que tanto están sufriendo esta crisis, pero también es verdad que estos días no es algo que me quite el sueño. Una buena cerveza se disfruta igualmente en casa.

17:15
Hay gente que está enfadada. Será la reclusión, claro. Muchos, por ejemplo, culpan a Sánchez del coronavirus por permitir las manifestaciones del 8-M. A ver, pinflois, los que os quejáis, durante ese mismo fin de semana fuisteis al mítin de Vox en Vistalegre, o al fútbol, al balonmano, a cualquiera de los actos preelectorales en Galiza o en Euskadi o a un bar petado de gente contagiada. De hecho, las que fueron a manifestarse el 8-M no se quejan ni se arrepienten de haber estado ahí, de la misma manera que vosotros no os quejáis de haber salido de casa durante aquel fin de semana. Eso ya es quejarse por quejarse.


20:00
En mi vecindario los aplausos son cada día más sonoros, más numerosos y más duraderos. No todo el mundo está cabreado y eso es bueno. Supongo que nuestra sociedad es consciente de que está haciendo algo importante y está protagonizando un momento histórico. A ver, no es que estemos celebrando una pandemia, pero sí nuestra determinación de enfrentaros a ella y la forma de hacerlo.


21:00
Me detengo a pensar en una cosa: los países que están mostrándose solidarios con los demás son principalmente China y Cuba. Quién nos lo iba a decir hace un par de meses. No veo por ningún lado a nuestros "aliados", que es una palabra que en adelante habrá que escribir así, entre comillas. Tanto hacerle la pelota a los Estados Unidos, a la Otan, a Europa y resulta que quien se preocupa por nosotros son aquellos países que no nos deben nada, y en el caso de Cuba, menos nos debe, que no le hemos dado más que agravios. A ver si en adelante los tratamos con un poco más de respeto.


21:15
Hay en mi edificio alguien que toca el acordeón más o menos hasta esta hora. Antes lo hacía los fines de semana, pero ahora es a diario. Cada vez toca mejor y empieza a dar gusto escucharle. También es verdad que al principio, hará cosa de un año, cuando empezaba, lo hacía fatal. No ponía una nota a derechas. Nunca me quejé porque confiaba en ella o en él. Me dije que había que darle una oportunidad y ahora me alegro. A diario, mientras trabajo, lo tengo como música de fondo. Maneja ya un repertorio amplio y empieza a dar muestras de virtuosismo. Si algún día conozco a esa persona, le pago una caña.