La droga intervenida por agentes de la Guardia Civil al gerente de un bar de Gondomar, en Pontevedra, eran 97,5 gramos de hachís, que fueron hallados detrás de la caja registradora durante una inspección en el establecimiento.
Según ha informado el Instituto Armado, en el marco de un dispositivo especial de seguridad ciudadana contra la venta y consumo de drogas en zonas de ocio, el pasado viernes se inspeccionaron dos bares de la localidad de Gondomar.
En uno de ellos, se localizó escondido detrás de la caja registradora un envoltorio con casi 100 gramos de hachís. Además, había 70 euros en metálico ocultos en paquetes individuales debajo de la máquina registradora, para "no mezclar" ese dinero con el de la recaudación del bar.
Así lo han comunicado a Europa Press fuentes de la Guardia Civil, que, a mayores, han indicado que en otra dependencia había pequeñas cantidades de cocaína y varias bolsas de plástico preparadas para el empaquetado y distribución de los estupefacientes.
Como resultado, el responsable del establecimiento fue detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública por tráfico de estupefacientes. El hombre pasó a disposición del juzgado de guardia de Tui, que decretó su puesta en libertad provisional aunque en condición de investigado.
Por otro lado, esa misma noche los agentes observaron que había clientes que entraban y salían de un bar, pese a que aparentaba estar cerrado al público. Una vez dentro, identificaron a los clientes que fumaban tabaco o consumían estupefacientes, formulando un total de 35 denuncias administrativas.
