La edad de oro del boxeo en Caldas

La panadería de Pedro Sierra se convirtió en el vivero de una generación de púgiles iniciada por los hermanos Alejandro, Andrés y Pedro ► El grupo logró notables éxitos y llegó a contar con más de una decena de deportistas, entre los que despuntó Joe Barrigán
De izquierda a derecha: cartel anunciador de una gala celebrada en Santiago, Pedro Sierra y Joaquín Piñeiro.CEDIDAS
photo_camera De izquierda a derecha: cartel anunciador de una gala celebrada en Santiago, Pedro Sierra y Joaquín Piñeiro. CEDIDAS

En la panadería de D. Pedro Sierra en la calle Real nº 21 comenzaron varios de sus hijos a practicar el boxeo, lo que terminaría suscitando, en los años 50 del pasado siglo, una gran afición en Caldas. No existía ningún precedente, ningún púgil veterano que pudiera dar lecciones, así que Alejandro, uno de los hermanos Sierra, comenzó su aprendizaje recibiendo lecciones de un chico de A Estrada, aunque solo disponían de un saco terrero y los guantes.

Otro hermano mayor, Andrés, hizo el servicio militar en la Marina en donde tuvo la oportunidad de aprender mucho. A su regreso, transmitió sus conocimientos a Alejandro y a Pedro. De esta forma, cuando casi nadie en Galicia se acordaba de este deporte, se introdujo en Caldas.

A los tres hermanos Sierra se unió José Alonso. Dejaron la panadería y empezaron a entrenarse en los locales y con el escaso material que el Servicio de Deportes del Frente de Juventudes les proporcionaba.

En entrevista de Máximo Sar a Manuel López Suárez, funcionario del Juzgado, éste contaba que el debut de los púgiles caldenses tuvo lugar en el Parque de la playa de Compostela de Vilagarcía de Arousa, el 28 y 29 de junio de 1947, con motivo del V Campeonato de Boxeo Provincial organizado por el Frente de Juventudes.

Fue un rotundo éxito, puesto que entre 32 participantes y después de pasar diversas emocionantes eliminatorias, Sierra I (Andrés) quedó campeón de los pesos medios. Sierra III (Pedro, que por aquél entonces tenía quince años), lo fue del peso mosca, y Alonso de los ligeros, lo que sirvió para que en la villa se despertase el entusiasmo y una enorme afición.

Al los entrenamientos empezaron a acudir muchos jóvenes; entre los nuevos destacaron Joaquín Piñeiro, los Doval y Manolito Blanco. Posterior a los citados fue José o Joe Barrigán, que peleó mucho en Vigo y fue muy popular, hasta el punto de que en algunas veladas lo anunciaban como vigués.

El grupo de la escuela caldense estuvo formado, salvo error u omisión, por los hermanos Sierra I (Andrés), Sierra II (Alejandro) y Sierra III (Pedro), Sierra IV (Miguel),Doval I, Doval II y Doval III, Joaquín Piñeiro, Barrigán, Couto el Zurdo, Manolo Blanco, López, Gándara, Legionario, Rey, y Taboada.

El reconocimiento que los púgiles formados alrededor de los hermanos Sierra tuvieron en el marco del boxeo gallego fue notorio. A pesar de ello, había muchos audaces que se atrevían a enfrentar con los expertos deportistas del Umia. Los caldenses sentían el boxeo, eran boxeadores de verdad.

Participaron en veladas celebradas en la sala del Metropol y el Jardín Park de Vigo, en el cine Capitol y el Teatro Principal de Santiago, en el Velódromo de Ferrol, en A Coruña, en el cine La Palma y la Plaza de Toros de Pontevedra, en Lugo. También boxearon, como era natural en Caldas, en la Plaza de Abastos, y en Vilagarcía, Marín, Padrón, Pontecesures, en otras muchas poblaciones.

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