El alcalde de Ourense acepta debatir el caso Baltar, pero no "todos contra uno"

El alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, ha mostrado este lunes su disposición a debatir "desde el respeto" la moción planteada por la oposición sobre una denuncia contra el presidente de la Diputación, Manuel Baltar, pero ha criticado la postura del "todos contra uno".  

A preguntas formuladas por los periodistas, el regidor ha dicho que la moción registrada por los grupos de la oposición en el Ayuntamiento -Democracia Ourensana, PSOE y Ourense en Común- sobre Baltar, al que una mujer acusa de haberle ofrecido trabajo a cambio de una relación sexual, será tratada "como cualquier otra moción" plenaria, en la próxima reunión plenaria municipal.

"Los plenos son un momento para el debate con educación, para escuchar los distintos planteamientos", ha recalcado Vázquez, quien ha manifestado que su partido, el PP, está "abierto a debatir cualquier moción que presenten el resto de los grupos", desde la premisa de que el debate sea "desde la serenidad y sin falta de respeto".

Esta mañana los tres grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Ourense han registrado la moción en la que exigen la "inmediata dimisión" así como una "disculpa pública" de Baltar.

En la moción, argumentan que aunque la denuncia se circunscribe al ámbito penal, hay una "responsabilidad política" de Baltar por lo que han hecho "corresponsables" tanto al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como a su homónimo en Galicia, Alberto Núñez Feijoo, según la concejala de Ourense en Común, Ledicia Piñeiro.

El regidor orensano ha insistido en que no se lleve el debate al terreno "electoralista" hasta el punto de que "pensemos que cualquier cosa vale".

Así, ha abogado por evitar las "broncas, insultos y ataques personales" registradas en el Consistorio en los últimos años que ha considerado necesario "eliminar".

Según el alcalde, "habrá que ver qué presentan, qué puntos presentan, y en qué consiste esa moción" que ha asegurado que los partidos han realizado "a escondidas".

Ha opinado que los tres grupos parten de una premisa que no comparte, la de "todos contra uno, en este caso contra el PP", y ha recalcado que la ética debe estar "por encima de todo".