Poio ayuda a la acogida de niñas de Chernóbil

El Concello firmó ayer el convenio para colaborar con dos familias
Las familias de acogida y representantes del Concello en el acto de ayer
photo_camera Las familias de acogida y representantes del Concello en el acto de ayer

Dos familias de Poio acogen este verano a niñas de una de las regiones rusas afectadas por el accidente nuclear de Chernóbil. El Concello de Poio, en colaboración con la asociación ‘Ledicia Cativa’, aportó una donación económica para apoyar la causa.

Los menores que se benefician del proyecto de la asociación se reparten por toda Galicia. Este año, Poio acoge a dos niñas: una que repite experiencia y otra que ha pisado el país por primera vez. La corporación municipal poiense ha decidido colaborar con esta iniciativa tras varios años participando en un programa de acogida de niños saharauis. Luciano Sobral, alcalde de Poio, piensa que "a colaboración con estas familias de acollida é moi importante para o Concello. Dende aquí axudamos aos veciños que se comprometeron a facer este traballo voluntario, que consiste en que os nenos que aínda sofren as consecuencias da catástrofe de Chernóbil poidan pasar aquí unha tempada e mellorar as súas condicións de vida". El alcalde recalca que el proyecto de ‘Ledicia Cativa’ "non se correponde só cunha cuestión social, senón tamén cunha axuda sanitaria para o benestar destes nenos e nenas".

Las dos niñas rusas aprovecharán los meses de julio y agosto para mejorar su calidad de vida y conocer otro país. Sobral añade que "é posible que fagamos unha xornada de convivencia con todas as familias de Galicia xunto coa colaboración dos seus respectivos concellos".

A la recepción de ayer acudieron, además de las niñas y miembros de las familias de acogida, la responsable de Obras e Servizos, Chelo Besada, y la concelleira de Benestar Social, Igualdade e Mocidade, Rosa Fernández.

El impacto psicológico y sanitario de la crisis de Chernóbil, la mayor catástrofe nuclear de la historia, sigue afectando a los menores casi 30 años después. La tierra y los alimentos que ingestan allí están altamente contaminados por la radioactividad. La asociación considera que estar una temporada en Galicia, alejados de esa tierra, les ayudará a recuperarse.

Comentarios