El Seprona de Deza y Tabeirós formuló 290 denuncias en 2016

Siguiendo la intensa línea de trabajo que mantienen los agentes del Servizo de Protección da Natureza (Seprona) de los cuarteles de la Guardia Civil de las comarcas de Deza y Tabeirós, durante el año pasado formularon cerca de 300 denuncias. Fueron, concretamente, 290 las que emitieron en los concellos de Lalín, Silleda, Vila de Cruces, Rodeiro, Agolada y Dozón (por lo que respecta a la comarca dezana) y en los municipios de A Estrada, Forcarei y Cerdedo (en lo que atañe a la de Tabeirós-Terra de Montes).

Además de las denuncias, el Seprona redactó 19 informes y efectuó 32 auxilios administrativos, todos ellos relacionados con el medio ambiente.

Las principales infracciones que fueron denunciadas a lo largo del año pasado fueron las vinculadas a depósitos ilegales o irregulares de residuos de todo tipo y vertidos a ríos y en terrenos forestales. Así, de las 290 denuncias, 93 corresponden a este tipo de acciones delictivas. Relativas a sanidad animal, el Seprona formuló 56 denuncias. Por infracciones relacionadas con el maltrato o abandono de animales de compañía realizó 46 intervenciones y por hechos en los que sus autores infringieron la normativa sobre montes efectuó 21. Los hechos denunciados que tuvieron que ver con vulneraciones de la legislación sobre aguas fueron 14, la misma cifra de denuncias que formuló este departamento del instituto armado por delitos cometidos contra el patrimonio o relacionados con el urbanismo en general. Finalmente, y según recoge la memoria de 2016 redactada por el Seprona, los agentes efectuaron en las dos comarcas del norte provincial once denuncias por tenencia de animales peligrosos sin cumplir los requisitos que determina la normativa al respecto.

ILÍCITOS PENALES. De las denuncias tramitadas resaltan tres por ilícitos penales. Así, en enero de 2016, los agentes investigaron a un vecino de Lalín como supuesto autor de un delito de maltrato a animales, con el resultado de muerte. J.D.G.V. propinó un fuerte golpe con un objeto contundente a un caballo de su propiedad, que acabó falleciendo. En Silleda ocurrió algo similar con un perro, al que supuestamente maltrató una vecina, M.M.G., de 58 años, propinándole golpes con un sacho.

El tercero de los ilícitos penales denunciados fue un incendio forestal registrado en la parroquia lalinense de Lebozán por una imprudencia cuando un vecino realizaba tareas agrícolas.

En cuanto a las inspecciones efectuadas, el Seprona realizó 124, la mayoría de ellas en explotaciones ganaderas, 37; en montes por trabajos forestales, 36, y en talleres, 19.