La ausencia de la esposa y de la empleada del hogar del narco José Ramón Dorgambide, El Panadero, dejó sin el núcleo probatorio clave al fiscal en el juicio por el presunto secuestro sufrido por ambas en noviembre de 2013.
El juez decidió continuar el plenario con el resto de testigos y anunció que la espantada de las allegadas del capo se resolverá con nuevas citaciones en próximas fechas.
Los dos acusados de amenazar y secuestrar a las mujeres negaron tales hechos, reconociendo visitas a Galicia en aquella época para salir de fiesta, en un caso, y acudir a una despedida, en el otro.
La vista oral continuó en la mañana de este martes con el resto de comparecencias, aunque no concluye en este día: el presidente de la Sección Segunda hará todo lo posible por contar con la presencia de las denunciantes que, años después, parecen no querer saber nada de lo sucedido.
José Ramón Dorgambide era el principal socio de David Pérez Lago, hijastro de Laureano Oubiña, en la red criminal dedicada al tráfico internacional de cocaína en la que también participaba la narcoletrada Tania Varela.
