Carlos Silva, padre de la presidenta de la Diputación de Pontevedra, falleció a la edad de 81 años en su domicilio de la ciudad de Vigo. La capilla ardiente está instalada en el tanatorio de Pereiró (Emorvisa), donde tanto Carmela Silva Rego como el resto de su familia están recibiendo múltiples muestras de condolencia.
El fallecido es también abuelo del futbolista Iago Falque, que hace unos días cumplía 28 años y que actualmente juega en el Torino, de la Liga italiana. Con él, del que se consideraba "el fan número uno", estuvo viviendo y acompañándolo en su periplo por varios equipos, desde que empezó a despuntar en la cantera del FC Barcelona.
Desde hace un tiempo, Carlos Silva se encontraba aquejado de unos problemas de salud que en su caso resultaron irreversibles.
De origen humilde, logró sacar adelante a su familia en el barrio vigués de O Calvario con mucho esfuerzo y con diversas ocupaciones profesionales, siempre apoyado por su esposa, con raíces en A Fonsagrada.
