Hacienda puede reclamar hasta 164 euros por año e hijo por las cuotas a concertados de Pontevedra

La Agencia Tributaria descarta una revisión masiva de las deducciones declaradas por los padres como donaciones, pero alerta de que realizará controles aleatorios

Alumnos del Centro Calasancio en una jornada con la Policía Nacional. R.F.
photo_camera Alumnos del Centro Calasancio en una jornada con la Policía Nacional. R.F.

El concepto "cuota voluntaria" que muchos centros concertados cargan a los padres varía enormemente según los concellos y las comunidades autónomas. En la capital de la provincia el importe oscila entre los 25 y los 30 euros al mes, con el matiz de que algunos colegios privados (como el Sagrado Corazón de Jesús o el Juan XXIII) no reclaman ningún tipo de donativo y solo cobran por servicios extraescolares. "Es la denominada sexta hora, que en Infantil se traduce en dos horas a la semana a mayores y en Secundaria una hora. Pero su participación es totalmente voluntaria. El padre que no la quiera, no la paga", aclara el director del Sagrado, Francisco Javier Barros.

En base a las cifras proporcionadas por los demás colegios (con la excepción del Centro San José, que no quiso desvelar sus cuotas), cada alumno de un centro concertado abona en un año entre 250 y 300 euros. Si sus padres incluyen estas cantidades en la declaración del IRPF como donaciones (como así las consideran las fundaciones que gestionan los centros), consiguen una deducción fiscal que oscila entre los 147,5 y los 164,5 euros por hijo y año.

Teniendo en cuenta que las reclamaciones de Hacienda tienen carácter retroactivo hasta los cuatro últimos años, la cuantía que está en entredicho podría llegar hasta los 658 euros por hijo, 1.316 euros para aquellas familias que tengan a dos hermanos en el mismo centro concertado.

71,89 euros en Galicia. Estas cifras son aún mayores a nivel de Galicia, donde la media de aportaciones voluntarias a los concertados está en 71,89 euros, según el informe de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres (Ceapa) para el presente curso, una vez visitados 15 colegios de toda la comunidad (la mayoría, de la provincia de Pontevedra).

De este modo, la cantidad media deducida irregularmente en las declaraciones ascendería a 311,6 euros. Si la revisión abarcase los últimos cuatro años se situaría en 1.246 euros por hijo, que la familia debería restituir a Hacienda, junto con los intereses correspondientes.

El mismo informe de la Ceapa denuncia que, actualmente, la estructura de precios que ofrecen los colegios no permite a las familias decidir pagar o no aquellas cuotas que legalmente tengan carácter voluntario, porque se envía al cobro una cuota conjunta e indivisible, cuyo pago es obligatorio.

Bajo el paraguas de "cuota voluntaria" o "actividades complementarias", el 96% de los colegios concertados reclaman ese pago y aunque en Galicia no hay constancia de casos de exclusión por negarse a abonarlo, en Madrid y Cataluña estos llegan al 28% y 15%.

Por su parte, la Agencia Tributaria aseguró ayer a este periódico que no está prevista una revisión masiva de las declaraciones, aunque sí se realizarán controles aleatorios. "Para rechazar el gasto deducible del colegio tenemos que poder justificar que la sociedad está recibiendo esos pagos como contraprestación por unos servicios", explica la institución.

La reforma fiscal beneficia al contribuyente
La fiscalidad de los donativos cambió en la última reforma del IRPF de 2015, siendo más positiva para el contribuyente, que ahora puede recuperar la mitad de las cantidades donadas. Y cuanto más tiempo se hagan aportaciones, mayor será la deducción. El porcentaje de la deducción se ha fijado en el 75% para los 150 primeros euros. Para el dinero que exceda de esa cantidad, la deducción también aumenta hasta llegar al 30%. Además, si se mantenido la donación a la misma entidad (o fundación) durante los dos últimos ejercicios, el porcentaje de la deducción se incrementa este año hasta el 35%, con lo que se premia la fidelidad de los donantes.

 

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