Hallan restos de un cuerpo humano en la que podría ser la primera necrópolis de Lalín

Las prospecciones para la recuperación del núcleo de Lalín de Arriba que impulsa el Concello descubren restos óseos de la época medieval

El edil y la directora del sondeo, junto a Martino (del que se aprecia el cráneo, a la derecha), y un vidrio. B.P.
photo_camera El edil y la directora del sondeo, junto a 'Martino' (del que se aprecia el cráneo, a la derecha), y un vidrio. B.P.

Las prospecciones arqueológicas perceptivas previas al proyecto de humanización del núcleo junto a la iglesia románica de San Martiño de Lalín de Arriba han descubierto la que podría ser la primera necrópolis de la capital dezana. El teniende de alcalde y edil de Urbanismo de la localidad, Nicolás González Casares, y la directora de las excavaciones, Elena Taboada, informaron este lunes del hallazgo de restos óseos de un cuerpo humano, enterrados en el lado sur del templo, a pocos metros de una de sus puertas de acceso.

Hay referencias de la existencia de la iglesia de Lalín de Arriba ya desde el siglo X, cuando se cree que podría haber en la zona una congregación. Las dos catas que se están realizando, dentro de los trabajos previos a la obra de recuperación del núcleo, que está financiada con fondos europeos, han destapado una necrópolis; enterramientos de diferentes épocas. "Neste lado, o Sur, apareceron restos humanos ben claros e, segundo din os arqueólogos, probablemente sexan previos ós séculos XIV e XV. Polo tanto será dos lalinenses medievais", explica el concejal, que dio en bautizar al humano hallado como Martino, por estar al lado de la iglesia de San Martiño, si bien se desconoce, al menos todavía, si se trata de un hombre o una mujer.

"Estamos falando dun poboador de Lalín de hai 600 ou 700 anos, ou igual máis", apunta. De hecho, según detalla la directora del sondeo, la estratigrafía, es decir, el análisis de la superposición de las distintas capas de tierra, evidencia la existencia de materiales de esa época, por lo que lo que queda por debajo de ellas es inferior a esos años. "Pode ser 50 anos anterior, ou 500. De momento, tal e como están os estudios sabemos que é medieval, pero non temos unha data exacta aínda", aclara Taboada.

La prospección continúa, por lo que es previsible que se encuentren más restos humanos. "De feito, na sondaxe Leste hai moitas tumbas, aínda que menos ósos. Hai moitos ocos escavados no sustrato", detalla la experta. "Estamos falando, posiblemente, da primeira necrópole de Lalín. Todos sabemos que este é o berce de Lalín, que naceu aquí, en Lalín de Arriba, e esta quizáis sexa unha prob de que os entrramentos dos lalinenses se fixesen aquí, ou igual son os propios monxes e monxas do mosteiro, que era mixto", argumenta González.

VISITA PROGRAMADA. "É o principio dunha historia de Lalín que haberá que seguir investigando", señala el edil. Martino fue descubierto el pasado jueves. Este lunes técnicos de Patrimonio visitaron la zona y es posible que este hallazgo obligue a ampliar las catas. Entretanto, el Concello programará "nos vindeiros días" una jornada de visita.

El descubrimiento también podría retrasar el inicio de las obras, un contratiempo que, según reconoce el edil, se ve compensado. "O proxecto de recuperación desta zona de Lalín de Arriba leva aparellado un coñecemento do que somos, do que fomos e da nosa memoria. En Lalín tiñamos un pouco perdida a nosa historia medieval e a ver se isto serve para saber daquel Lalín", dice.

Vidrio con peces decorativos y varios metales
Las catas en el entorno de la iglesia de Lalín de Arriba han sacado a la luz otros materiales que dan pistas para confi gurar la historia de la capital dezana. Además de los restos humanos, otro de los hallazgos llamativos, y de una época más tardía que estos, es un trozo de vidrio cuya edad se desconoce todavía, pero conserva una decoración con peces, símbolo del Cristianismo, un elemento que encaja en el contexto.

Clavos, trozos de metales, cerámica y cuernos de vacuno son otros de los elementos encontrados, que el edil confía en que puedan ser analizados en el Centro Arqueolóxico del Pazo de Liñares.

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