Opinión

Huertos escolares

UNA HUERTA es un lugar para aprender sobre la naturaleza, la agricultura y la nutrición. Un lugar para el disfrute y el esparcimiento. Una huerta es una herramienta educativa que contribuye al fomento de actitudes solidarias basadas en el compañerismo y el respeto al medio ambiente. Una huerta es un laboratorio al aire libre donde valorar el planeta y comprender el territorio en el cual vivimos. Es un espacio para aplicar el concepto de sostenibilidad en nuestro día a día, valorar la riqueza cultural de los saberes históricos y la riqueza inmaterial de los saberes populares. Sirve para conocer el comercio justo, el esfuerzo y la satisfacción del trabajo colectivo, fomentando la cooperación frente al individualismo y la competencia. Útil en estos tiempos efímeros y posmodernos, donde prevalece la cultura narcisista de la inmediatez. Frente a la futilidad del instante, la frugalidad de la espera. Frente al producto acabado envuelto en celofán, la observación meditativa de la evolución constante en crecimiento. Cada vez son más los centros educativos de toda Galicia que se adhieren al proyecto coordinado por la organización Manos Unidas y apoyado por la Xunta de Galicia: Fame Cero. Consiste en la creación de huertos escolares para que los alumnos de infantil y primaria aprendan técnicas de cultivo ecológico y valoren los productos de proximidad, respeten la naturaleza, valoren el medio ambiente y comprendan la necesidad del desarrollo sostenible evitando el despilfarro de alimentos. Para los alumnos, la huerta es un espacio donde plantar esas semillas que a los pocos meses darán su fruto, el fruto de su propio trabajo, un regalo para los sentidos que los vincula con el centro y es motivo de orgullo, autoestima y satisfacción para si mismos. Para los profesores es una herramienta educativa transversal porque pueden impartir su materia académica fuera del aula y que mejor lugar que en la huerta del colegio, como hacían los filósofos atenienses. La finalidad de este proyecto es la consecución del Objetivo de Desarrollo Sostenible 2, de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas: Hambre Cero. El objetivo del proyecto es, en último término, constituir la I Red Gallega de Escuelas por el Derecho a la Alimentación para después conectarlas con los centros educativos de América Latina, África y Asia, para construir una Red Global de Escuelas por el Derecho a la Alimentación donde alumnos de diferentes culturas, realidades y continentes puedan compartir visiones, experiencias, y ofrezcan soluciones a los problemas cotidianos del planeta, como el hambre, el cambio climático y la escasez de recursos compartidos, fomentando la creación de una ciudadanía internacional comprometida y solidaria. Convertir la escuela en algo más que en un centro de trasmisión de conocimientos. Transformar la escuela para convertirla en un lugar para el aprendizaje de un modo de vida que busque la felicidad del ser humano.

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