Identifican unos restos aparecidos en Cantabria hace 25 años: son de un vigués

Los avances en el reconocimiento de ADN permitieron reabrir la investigación sobre los restos hallados en una playa de Cantabria en 1994

Playa de la Tablía, en Suances. GOOGLE MAPS
photo_camera Playa de la Tablía, en Suances. GOOGLE MAPS

La Guardia Civil ha podido identificar, gracias a los avances en el estudio del ADN, unos restos humanos encontrados hace 25 años en la playa de Tablía de Suances y que corresponden a un joven que desapareció en Vigo en el año 1994. 

La investigación, llevada a cabo junto con el Servicio de Criminalística del instituto armado se remonta al 12 de abril de 1994, cuando se abrieron diligencias por el hallazgo de restos humanos en la citada playa, desconociéndose a quien podían pertenecer. 

Entonces era imposible saber su procedencia pero los avances en el reconocimiento del ADN lo hicieron posible hace dos años

Según ha explicado la Guardia Civil en nota de prensa, aunque todo apuntaba que habían sido arrastrados a la playa por las corrientes marinas, en ese momento fue imposible saber su procedencia, por lo que, con la oportuna autorización, se tomaron muestras biológicas para la obtención del ADN mitocondrial, sin que entonces se pudieran lograr resultados con los perfiles que se estudiaron. 

En al año 2017, los avances en el Departamento de Biología del Servicio de Criminalística permitieron obtener nuevos indicadores del ADN humano, por lo que se retomó esta investigación, añadiendo los resultados a las diferentes bases de interés, entre ellas la FENIX. 

Finalmente, en mayo de este año el trabajo conjunto del Servicio de Criminalística y del Grupo de delitos contra las personas de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Cantabria, permitiera que esos últimos indicadores de ADN dieran información coincidente con otros perfiles genéticos. 

Coincide el perfil con el de la madre y el hermano
Estos perfiles coincidían con la madre y el hermano de un varón denunciado como desaparecido en marzo de 1994 en Vigo, cuando tenía 25 años. 

Desde la Guardia Civil se ha destacado que estos avances, además de abrir un mayor campo a la obtención de indicadores de ADN para el estudio de hechos delictivos, permiten, como en este caso, la identificación de restos humanos y así que las familias puedan recuperar a sus seres queridos.