Varias dotaciones de la Policía Nacional, la Policía Local y los Bomberos llegaron a toda velocidad a primera hora de la tarde de este viernes a un local de la avenida de Lugo. El motivo, la densa humareda de color negro que procedía de su interior, de origen en principio desconocido, y que ya había alterado la tranquilidad vecinal tras una impactante explosión que proyectó el escaparate hacia la vía pública. El incendio, que se atacó sobre las 16.25, se habría iniciado mucho tiempo antes, pues consiguió calcinar todo el material almacenado en el lugar en el que se originó a pesar de la veloz intervención de las autoridades.
Las causas del siniestro se desconocen, según indicaron fuentes del Parque Municipal de Bomberos, que, sin embargo, tienen claro que la ignición se produjo en la zona del almacén, donde la empresa tenía material de eventos, tal como equipos de luz, sonido y otros objetos tecnológicos.
Por la forma en la que estaba ardiendo el área cuando llegaron los equipos de emergencia, con una gran sensación de calor y el humo ya muy bajo, los Bomberos saben que llevaba más de una hora en combustión. Las elevadas temperaturas que, poco a poco, fue alcanzando el interior, provocaron la ruptura de una tubería de agua (y la consiguiente inundación del local) y una explosión de gases que se llevó por delante las dos grandes ventanas que configuraban el escaparate del establecimiento.
Sobre ello, los Bomberos explicaron que se trata de un efecto normal en esta clase de incendios que llevan mucho tiempo en marcha. Para la extinción del mismo no se precisó gran cantidad de agua, dado que no existían demasiados focos, precisaron las mismas fuentes. "Cuando llegamos había una combustión muy intensa, una pirólisis de todo el material. El incendio estaba generalizado y el calor también era muy intenso".
Sin embargo, apenas una hora después, sobre las 17.30, los efectivos de emergencias ya tenían la situación perfectamente controlada. Por suerte, no pasaba nadie por la calle en el momento de la explosión.
DESALOJO PROVISIONAL. Los vecinos del inmueble que resultó afectado por el incendio y de los edificios colindantes se sorprendieron ante la magnitud del incendio y, especialmente, por la explosión que hizo saltar por los aires el escaparate del establecimiento. La densa humareda de color negro que se generó obligó a que los vecinos de los pisos más bajos tuviesen que ser desalojados de forma provisional, hasta que los Bomberos consiguieron ventilar correctamente todas las estancias.
El portal del edificio de viviendas y la puerta trasera del local afectado permanecieron abiertos. Los daños en el almacén fueron muy cuantiosos, quedando todo calcinado.
