Incontestable triunfo de Diego Ventura en Pontevedra

El Fandi se cerró la Puerta Grande con la espada

El rejoneador Diego Ventura reventó este sábado la feria de la Peregrina de Pontevedra con un triunfo incontestable de cuatro orejas, en una tarde en la que David Fandila El Fandi, que paseó un apéndice como Antonio Ferrera, se cerró la Puerta Grande con la espada.

Diego Ventura demostró este sábado en Pontevedra po rqué es el número uno del rejoneo actual. Lo hizo con un triunfo rotundo de cuatro orejas en la que ofreció una gran dimensión de lo que es el auténtico toreo a caballo.

A su primero lo toreó de maravilla en todos los tercios. Destacó los galopes a dos pistas encelando a milímetros de la grupa. No falló tampoco con los palos y ni con las cortas finales. Lo mejor, sin duda, llegó sobre Importante. Rejonazo al primer envite y dos orejas sin discusión.

Otros dos apéndices logró del cuarto, en el que nuevamente hizo las delicias del respetable en una completísima, variada y muy torera labor, brillando sobremanera a lomos de Bronce. Otra vez anduvo contundente en la suerte suprema.

Otro que fue un huracán hoy en el coso pontevedrés fue El Fandi, que recibió a su primero de rodillas antes de quitar por vistosas zapopinas. En banderillas formó un auténtico alboroto. La gente le coreaba. Muleta en mano no bajó el diapasón con una labor plena de facultades y efectos especiales que gustaron, y mucho, a los tendidos.

Tenía la Puerta Grande en la mano, pero el descabello dejó el premio en una solitaria oreja.

La espada fue también la que le privó de tocar pelo con el flojo sexto, en el que volvió a demostrar que es un torero que gusta mucho en Pontevedra con otra actuación entregada y variada de principio a fin. Pero, ya está dicho, el mal uso de los aceros dejó todo en unas cariñosas palmas de despedida.

Antonio Ferrera se las vio con dos toros tan nobles como blandos de Virgen María con los que el balear –aunque extremeño de adopción– anduvo muy templado, muy torero y muy capaz. Solo cortó una oreja del quinto, pues en su primero una estocada trasera demoró que el toro rodara, algo que enfrió el ambiente.

FICHA DEL FESTEJO
Dos toros para rejones de Los Espartales, buenos; y cuatro en lidia ordinaria, uno -el segundo- de Santa Ana y otros tres –tercero, quinto y sexto– de Virgen María, aceptablemente presentados, nobles y blandos a partes iguales.

El rejoneador Diego Ventura, dos orejas y dos orejas.

Antonio Ferrera, ovación tras leve petición y oreja.

David Fandila El Fandi, oreja y palmas en la despedida.

La plaza registró casi tres cuartos de entrada en los tendidos. 

Comentarios