La Inspección de Trabajo cuestiona las instalaciones de la Policía Local de Pontevedra

Un informe de la Autoridad laboral enumera 15 deficiencias de la sede del cuerpo tras una denuncia de Comisiones Obreras e insta al Concello a corregirlas

 

El delegado de Comisiones Obreras en el Concello de Pontevedra, Antonio Millares, durante la rueda de prensa de este jueves. JAVIER CERVERA-MERCADILLO
photo_camera El delegado de Comisiones Obreras en el Concello de Pontevedra, Antonio Millares, durante la rueda de prensa de este jueves. JAVIER CERVERA-MERCADILLO

La Inspección de Trabajo cuestiona la idoneidad de las instalaciones que la Policía Local tiene en Pontevedra, ubicadas en los "vomitorios" de la planta baja del Pazo da Cultura. Así lo expone en un informe realizado a raíz de la denuncia que Comisiones Obreras realizó el pasado 5 de julio ante la Autoridad laboral.

Tras comprobar 'in situ' la situación de la Jefatura el pasado 20 de septiembre, el inspector emitió una resolución que este jueves dio a conocer el sindicato obrero. En ella, se enumeran 15 deficiencias que instan al Concello a corregir. 

Entre ellas figura, una que tiene que ver con la necesidad de aumentar la altura en varias dependencias: en la oficina administrativa, pasando de los 1,95 metros actuales a los 2,5 metros que marca la Ley, y en la puerta de entrada principal y el pasillo de acceso a las instalaciones, de 1,90 y 1,97 metros, respectivamente.

La zona del armero es otro de los puntos negros de la Jefatura. Su situación, en un pasillo por el que pueden coincidir hasta 40 agentes en los cambios de guardia, no es el más apropiado. También se señala que la situación del tablón de anuncios sindical, ubicado en un descansillo, debe tener otro emplazamiento.

El informe alude también al estado de los vestuarios. "Para una plantilla de cien efectivos dispone de dos aseos, y otro más de minusválidos que está inutilizado al almacenar productos de limpieza", señala el inspector. "Cuenta con tres lavabos, tres inodoros de pie que se consideran insuficientes para la plantilla existente", añade. 

El agua de los grifos presenta "una coloración ocre, posiblemente debido a la oxidación de las tuberías de conducción o del sistema de almacenamiento de agua" que se comparte con el Pazo da Cultura. "El suministro de agua caliente es muy lento, necesitándose de un período superior a los cinco minutos para obtener una temperatura adecuada para poder ducharse", recoge el dictamen.

El sindicato reclama una nueva Jefatura en otro lugar. 'No tiene que ser en el centro, el extrarradio valdría', apunta Millares

El organismo laboral también advierte de que los vestuarios tienen unas dimensiones "tan reducidas" que los mandos se ven obligados a cambiarse en sus despachos, donde se han habilitado una zona de taquillas. 

La inexistencia de un acceso para personas con movilidad reducida desde la planta baja a la primera, la falta de una barandilla en la escalera de acceso y los problemas de climatización cierran las deficiencias del centro de trabajo. "Analizados todos y cada uno de los puntos, se concluye que muchos de los problemas y deficiencias que planean las instalaciones objeto de inspección tienen un carácter estructural y de muy difícil solución y otras precisan de la actuación conjunta con el titular del edificio, el Pazo de Congresos", concluye la Autoridad laboral, que plantea un plazo de entre tres y seis meses al Gobierno local para que solucione estas carencias.

El delegado de Comisiones Obreras en el Concello, Antonio Millares, aseguró que este informe hace necesaria una nueva sede para la Policía Local, que ocupa su actual sede de forma provisional "desde 2002", cuando el cuerpo fue trasladado de la Praza da Verdura a su actual ubicación. El sindicalista cree que esta medida tendría que llevarse a cabo "a corto plazo" y sostiene que el nuevo emplazamiento no tiene por qué estar en pleno corazón de la ciudad. "No tiene que ser en el centro; el extrarradio valdría", afirmó.

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