La mansión de Montalvo en la que se reunía para preparar los alijos con sus presuntos cómplices, la nave de casi 3.000 metros cuadrados en la que se construían las superplaneadoras, un gran número de viviendas en Cambados, dos chalés en Vilagarcía y hasta dos pisos de grandes dimensiones en Loureiro Crespo y Benito Corbal, la zona más exclusiva de Pontevedra. Eso es solo una pequeña parte de los 40 inmuebles atribuidos a Sito Miñanco e intervenidos por la Agencia Tributaria en los meses posteriores a la operación Mito, el mayor golpe policial contra el narcotráfico de los últimos años. Hacienda, a instancias de la Audiencia Nacional, ha aplicado las "anotaciones preventivas" a todos ellos, lo que implica la prohibición de realizar operaciones con ellos (no pueden ser vendidos) aunque, curiosamente, no impide que sigan siendo utilizados por sus propietarios.
Se da la circunstancia de que José Ramón Prado Bugallo no figura como propietario de ninguno de ellos. La mayoría están a nombre de la inmobiliaria San Saturnino que dirige una de sus hijas y que fue objeto de un minucioso registro el 5 de febrero, cuando explotó la citada operación Mito. De la documentación intervenida aquella jornada procede la intervención de los bienes, que no solo son viviendas, sino también parcelas, locales comerciales, garajes y trasteros, la mayoría de ellos en Cambados, pero también en Sanxenxo, Vilagarcía (donde hay otros dos chalés) y Pontevedra.
Paralelamente, agentes del Sur de la Península estudian la situación de otras tres propiedades: la vivienda en la que residía en Algeciras, un pequeño piso ubicado en un barrio humilde de la misma localidad gaditana y un apartamento situado en el mismo edificio del párking en el que supuestamente trabajaba Miñanco durante la semana, lo que le permitía abandonar el Centro de Integración Social en los meses anteriores a su detención.
Tras el trabajo de los especialistas del grupo II del Greco Galicia, ahora ha llegado el turno de sus compañeros de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), que, desde su cuartel general en Madrid, siguen el rastro del dinero no solo del capo cambadés, sino del resto de integrantes de la que presuntamente era la organización de narcotráfico más poderosa de Europa en el momento en el que fue desmantelada. De las pesquisas saldrá un nuevo proceso por blanqueo de capitales que se convertirá en otro frente judicial para Miñanco.
Pero no solo Sito ha sufrido la intervención de bienes. Uno de sus supuestos lugartenientes, David Pérez Lago (hijastro de Laureano Oubiña) está en el punto de mira de la Agencia Tributaria al contar con un patrimonio que, pese a su anterior condena por blanqueo, sigue siendo desproporcionado a su actividad laboral lícita. Así, la vivienda en la que reside en A Laxe (ubicada en la misma parcela que el chalé de su famoso padrastro que fue recientemente subastado) y varias empresas, algunas de ellas a nombre de mujeres relacionadas sentimentalmente con él, están siendo analizadas con lupa por los expertos en delincuencia económica.
Otros inmuebles relacionados con la operación y que han sido intervenidos por Hacienda son una vivienda unifamiliar ubicada en Dena (Meaño), un piso en Noia (A Coruña) y un chalé en la zona de Baoina, todas ellas vinculadas a personas presuntamente relacionadas con el narcotraficante más famoso de España.
Por otra parte, Miñanco sigue a la espera de conocer la fecha en la que deberá volver a comparecer ante la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra, donde deberá responder por un proceso de blanqueo de capitales por el que se expone a importantes penas de prisión y al embargo definitivo de muchos de sus bienes, en los que se incluyen los que se han vuelto a intervenir ahora.
El abogado del capo, Gonzalo Boye (el mismo que defiende a Carles Puigdemont y a su equipo), había conseguido el aplazamiento al recusar al tribunal pontevedrés, pero el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia dictaminó que el juicio debe continuar.
LENTITUD. Muchas de las propiedades que han sido intervenidas por la Agencia Tributaria tras la operación Mito ya habían sido bloqueadas previamente, a la espera del juicio por blanqueo que se aplazó la pasada primavera en Pontevedra.
La lentitud a la hora de sacar adelante los procesos permitió al capo, según la Policía, seguir disfrutando de ellos y empleándolos para delinquir.
Algunas de las propiedades
Mansión de Sito Miñanco en Montalvo (arriba), considerada uno de los principales puntos de reunión en los últimos meses antes de ser detenido, y fachada de los dos edificios de la milla de oro de Pontevedra en los que tiene sendas viviendas.
