Los jugadores del Deportivo han pasado este martes los PCR a los que estaban citados para el partido de este miércoles con el Fuenlabrada, aunque lo hacen pendientes de que se confirme oficialmente el aplazamiento del encuentro.
El Deportivo, que había rechazado la posibilidad de pasar los test del coronavirus el lunes, como le había requerido LaLiga, ha accedido a someterse a esas pruebas este martes una vez que el Comité de Competición reprogramó el partido suspendido con el Fuenlabrada para el miércoles.
Una vez conocida la resolución de Competición, el Deportivo empezó a localizar a los jugadores para que estuvieran disponibles para pasar los test y jugar el partido.
El primero en llegar a la Ciudad Deportiva de Abegondo fue el portero Dani Giménez, que ha disputado todos los partidos como titular esta temporada en LaLiga SmartBank.
El Deportivo necesita, al menos, tener siete fichas de la primera plantilla para afrontar el partido y cumplir así la normativa
También han pasado por esas instalaciones otros como Vicente Gómez, Ager Aketxe, Víctor Mollejo, Uche Agbo, Sabin Merino, Aleksandar Jovanovic, Michele Somma o el entrenador, Fernando Vázquez.
Algunos de esos jugadores ya se habían despedido del deportivismo en sus redes sociales, caso de Mollejo, que está cedido por el Atlético de Madrid, o el portero Jovanovic.
El Deportivo necesita, al menos, tener siete fichas de la primera plantilla para afrontar el partido y cumplir así la normativa.
Además, se han sometido a los test los canteranos Juan Rodríguez y Yago Gandoy, que han trabajado con el primer equipo desde que se reanudaron los entrenamientos tras el parón por la Covid-19.
El partido con el Fuenlabrada fue suspendido el pasado 20 de julio por los positivos en Covid-19 del conjunto madrileño, que ya estaba concentrado en A Coruña.
Sí se disputó el resto de la última jornada de Segunda División, que tenía que haberse celebrado en horario unificado, lo que ha propiciado las reclamaciones del Deportivo al considerar que se vulneraron sus derechos.
El Deportivo, que dependía de otros resultados para mantenerse en Segunda División, bajó a Segunda B por las victorias del Lugo y el Albacete.
