El edificio de Caldas de Reis destinado a acoger la sede de la Fundación Comarcal está siendo usado para impartir clases de baile, y la persona que ofrece el servicio cobra por realizar esta actividad. Esta práctica es irregular, sostienen algunos vecinos, porque usa el patrimonio público en su beneficio particular.
El alcalde mantiene que lo cedió a una asociación y afirma desconocer si los alumnos pagan por las clases que reciben
El alcalde, Juan Manuel Rey, sostiene que el local fue cedido a una asociación folclórica, llamada As Burgas, y agrega que desconoce si quienes participan en sus actividades pagan, además de recordar que el Concello rechazó otras peticiones en el mismo sentido por proceder de particulares.
Quienes mantienen que no debe permitirle el uso exponen que, además de no pagar, hace competencia desleal a otros colectivos que ofrecen las mismas actividades y deben hacer frente al pago de monitores, el consumo de luz y los impuestos correspondientes.
Quien dispone de permiso para usar el local municipal impartió clases anteriormente en la Sociedad Mercantil Recreativa Caldense y también dispuso durante varios años de las llaves que le permitían el acceso y el uso del Auditorio municipal, agregan los vecinos que reclaman al Gobierno local que ponga fin a una situación que califican de "escandalosa" e "injusta", que se agrava ahora al haber ofertado clases de nuevas disciplinas que nada tiene que ver con el baile folclórico.