Un nuevo frente común de la oposición en el Pleno sirvió este lunes de excusa al Gobierno local para incidir en el mensaje de que PSOE, Marea y Ciudadanos bailan al son que toca el Partido Popular. En esta ocasión, la dicusión se centró en el mal estado en el que se encuentran las instalaciones de la Policía Local. El PP logró el apoyo de sus compañeros de Corporación, excepto el BNG, para urgir una reforma de la sede en la que trabajan los agentes municipales.
El edil popular José Luis Martín relató punto por punto los problemas que presentan las dependencias, vinculadas al Pazo da Cultura y que él mismo denominó "mazmorras". Desde falta de iluminación y ventilación, a problemas de espacio y seguridad. "El armero está situado en una zona de tránsito, que no es el mejor sitio. Y la salida de emergencia está bloqueada, algo que es gravísimo", denunció Martín, que aseguró que la oficina de atestados parece "una pista de squash" y criticó los fallos del sistema de comunicaciones que utilizan los agentes, con problemas de cobertura en distintas zonas y barrios de la ciudad, como Monte Porreiro. "En vez de utilizar el sistema público, el PMR, ustedes lo privatizaron. Han esquilmado los servicios públicos", dijo a la bancada nacionalista.
Los compañeros de oposición del PP lamentaron también la situación de las instalaciones y, pese a aceptar el "parche" propuesto, PSOE, Marea y Ciudadanos coincidieron en la necesidad de buscar un emplazamiento alternativo para la Policía Local. "Hai que aspirar a unhas dependencias novas", reclamó Luís Rei, de Marea.
El Gobierno pontevedrés reconoció las "deficiencias" de la sede. Lo hizo por boca de la edil de Seguridade Cidadá, Carme da Silva, que afirmó que esta problemática no solo afecta a esta instalación, sino también a otros inmuebles municipales como el Teatro Principal. "Tamén estamos de prestado na sede de Michelena e é certo que na cafetería do Pazo da Cultura hai problemas de calor. Pero é curioso que todo isto salte cun conflito aberto", dijo la concejala nacionalista en referencia a la reivindicación salarial que ha llevado a los policías locales a convocar protestas en contra del BNG, la última de ellas este lunes en el Pleno, en la que el colectivo abucheó a Da Silva.
La edil del Bloque, que relacionó al PP con las movilizaciones de los policías, reprochó a la oposición que no se hiciera eco de estas deficiencias en la visita que todos los grupos realizaron a la sede en septiembre del año pasado.
La sesión plenaria fue escenario de otras dos pinzas de la oposición contra la voluntad del Gobierno local. La primera fue a raíz de una moción del PP sobre la creación de una unidad de control del gasto, que los populares corrigieron a raíz de una enmienda de Ciudadanos, que señalaba que este órgano solo tendría atribuciones de gestión y no de fiscalización de los contratos menores, una tarea, esta última, que le compete al servicio de Intervención municipal.
El segundo de los frentes comunes de PP, PSOE, Marea y Ciudadanos se produjo en una moción urgente, fuera del orden del día, en la que estos tres grupos instaban al Concello a cambiar la fecha y el horario de los plenos al penúltimo jueves del mes a las 9.30 horas y no los lunes a las 11.00 horas.
La oposición se une para urgir la reforma de la sede de la Policía Local
Aunque reconoce las "deficiencias", el Gobierno local votó en contra de la moción del PP al coincidir esta con el conflicto salarial de los agentes
