La varicela bate récords en Galicia en el año de regreso de la vacuna a las boticas

La incidencia del virus se incrementa en más del 56% respecto a 2015 y arroja tasas que no se alcanzaban desde 1997
Una farmacéutica muestra una vacuna contra la varicela, reintroducida en febrero en las boticas gallegas
photo_camera Una farmacéutica muestra una vacuna contra la varicela, reintroducida en febrero en las boticas gallegas

La varicela batió récords en Galicia en 2016, con 13.349 casos decretados de infección según los datos acumulados por el Sergas y que abarcan hasta comienzos del pasado diciembre. La tasa roza los 500 casos por 100.000 habitantes —489 en concreto—; una marca simbólica que, en las últimas dos décadas, solo se rebasó en el año 1997 —cuando de hecho se situó por encima de los 600 casos— y se acarició en 2002.

Los datos comparados reflejan la bianualidad asociada a esta enfermedad, puesto que el salto cuantitativo respecto de 2015 muestra un incremento superior al 56% en el número de pacientes, mientras que frente al curso anterior —cuando se registraron unos 11.500 casos— este aumento global se reduce hasta algo más del 15%. Precisamente, y rompiendo con la tendencia que se sostenía a lo largo de una década entera, aquel 2014 se volvió a superar la frontera de los 400 casos por cada 100.000 habitantes.

Es evidente ese año la influencia de la retirada de las farmacias de la vacuna de la varicela, limitada al ámbito hospitalario para campañas oficiales de vacunación y justificado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad, por un presunto abuso en su prescripción. En respuesta, la Sociedad de Pediatría de Galicia advirtió entonces de que la comunidad sufriría "un pico importante" de varicela a dos años vista, alertando además de que el 15% de las varicelas infantiles presentan dificultades.


Saúde Pública calcula que, desde el pasado abril, la cobertura de vacunación ha sido 
"próxima ao 80%"


La revocación de esta medida el pasado febrero, y el comienzo en abril de la vacunación infantil para los nacidos a partir de 2015, no tendrán aún su reflejo claro hasta el año próximo, explica el subdirector de Saúde Pública, Xurxo Hervada, que augura que la de esta temporada será "a última gran onda de varicela que imos ver durante moito tempo". Los planes de vacunación del Sergas abarcan también la inmunización de los preadolescentes de 12 años que no hubiesen padecido la enfermedad y de grupos de riesgo como mujeres en edad fértil, padres con hijos susceptibles de contraer el virus o personal docente y sanitario.

El resto de la población tendrá que acudir a las farmacias para comprar la inyección. El nuevo calendario infantil incluye, además de esa primera administración en el quinto trimestre de vida, una segunda dosis de refuerzo a los tres años. "A de 2016 será a última gran onda por sempre se seguimos vacinando", matiza así Hervada. atajar la "vía intermedia".

ATAJAR LA "VÍA INTERMEDIA". Este objetivo de alcanzar casi la plena vacunación de los pequeños pretende atajar una "vía intermedia " que estaba conformando un inquietante campo de cultivo.

Según detalla Hervada, se había decidido priorizar que la población contrajera el virus a corta edad, ya que sus efectos en las personas adultas es más peligrosa, por lo que solo se vacunaba a los niños que tuvieran "especial risco" porque sufrieran enfermedades concomitantes, déficit de inmunidad u otras circunstancias que pudieran agravar la patología. Al mismo tiempo esto conseguiría "non alterar a circulación do virus, que favorecía unha menor incidencia de herpes zóster en adultos". A pesar de este planteamiento, el resultado fue "a peor situación posible". Es decir, una población vacunada en torno al 50%, lo que dificulta que el virus se contagie con su frecuencia natural —recuerden la tradición de juntar a hermanos para favorecer la transmisión entre ellos— y propicia que permanezca 'latente' y con potencial para afectar a todos estos individuos no inmunizados "15 ou 20 anos despois, cando é máis grave".

No obstante, ese impacto eventual que podía cebarse con la población adulta "non se chegou a dar", aclara Hervada, que considera que esta tendencia a la inmunización universal puede evitar definitivamente que se produzca. Por el momento, en sus estimaciones iniciales, Saúde Pública calcula que, desde el pasado abril, la cobertura de vacunación ha sido "próxima ao 80%", lo que se traduce en una media mensual de más de 1.600 niños atendidos.

Es una acción sistemática, por lo que ese abuso que denunciaba la AEMPS tampoco tiene ya razón de ser. "A partir de ahora se seguirán dando las ondas de varicela pero en mucha menor importancia", pronostica Hervada, que considera que "en cinco anos" van a ser "moi pequeniñas e máis irregulares", bajando a los niveles del año 2007 —con una tasa inferior a los 300 casos por 100.000 habitantes— y "seguirán descendendo e espaciándose no tempo", afirma.

Comentarios