La inauguración de la ENM (en agosto se cumplen 75 años) supuso un hito en la historia de la Armada Española. El acontecimiento fue de tanta relevancia que pocos años después sirvió como tema a una producción cinematográfica basada en un relato corto del capitán de corbeta José Luis de Azcárraga y escrito en colaboración con Ramón Torrado, que la dirigiría bajo el titulo de Botón de Ancla y que fue estrenada en 1948. El film no solo supuso la mayor propaganda cinematográfica del nuevo centro académico donde se forman los oficiales de la Marina de Guerra sino también de Marín, que en aquellos años despegaba como pueblo turístico por sus playas y gastronomía y como Puerto de Interés General del Estado. Gracias a la película -cuya sinopsis describe a tres amigos, caballeros alumnos de la ENM que se enfrentan entre sí por cuestiones amorosas- la imagen de Marín dio la vuelta a toda España y parte del extranjero y se convirtió en punto de interés para miles de forasteros que acudían a ver, aunque nada más fuese por fuera, el recinto académico militar.
El rodaje en Marín de Botón de Ancla fue motivo a lo largo de la historia de muchas anécdotas y curiosidades que podemos encontrar en la hemeroteca. Director, actores, y elenco de técnicos y montadores convivieron con los marinenses durante algo más de tres meses (año 1947), tiempo que duró la filmación. Los bares del entorno urbano
marinense eran punto de encuentro para los momentos de descanso de los actores Antonio Casal (amante del baño en la playa de Portocelo), Jorge Mistral (con quien mi padre empatizó a la hora del chiquiteo y de tocar la guitarra), Fernando Fernán Gómez, Xan das Bolas... Destacan también los múltiples retrasos padecidos durante el rodaje por causa del mal tiempo que hizo que se disparese su presupuesto. El estreno tuvo lugar en enero de 1948 en el Cine Avenida (no en el de Marín) sino en el de Madrid. No se en que fecha llegaría a nuestros cines pero sí pude saber que a Galicia llegó a través del cine Fraga de Vigo en marzo del mismo año de su estreno. Le película obtuvo el premio del Sindicato del Espectáculo y allá donde se reestrenaba conseguía levantar al público con ovaciones y aplausos. Fue todo un éxito del que aún hoy día se habla. Incluso, aprovechando el ‘buen sabor de boca’ que dejó el primitivo Botón de Ancla, fueron muchos los remakes que se realizaron posteriormente pero ninguno igualó ni superó al original.
No cabe duda de que la proyección de Marín en el exterior se debe en gran parte a Botón de Ancla’, y esto hay que reconocerlo 70 años después de su salida a pantalla. A raíz de aquello son muchas las personas de fuera que cuando uno les dice ser de Marín, enseguida te contestan con la pregunta: ¿Marín, donde está la Escuela Naval’?.
