Ser autónomo en tiempos de coronavirus no es nada fácil y, pese a la vocación, los posibles colchones y los anuncios de ayudas, muchos acaban poniendo punto y final a su travesía emprendedora. Según los datos facilitados este miércoles por la Asociación Gallega de Trabajadores autónomos y del Mar, Agtamar, y la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (Upta), en la provincia de Pontevedra se contabilizaron durante el mes de marzo 1.232 bajas de autónomos, un número que duplica a las que se cuantificaron en febrero (654) y que, además, supera en un 52% a las altas contabilizadas durante el mismo intervalo. Como resultado, la provincia se ha quedado en los 66.258 trabajadores por cuenta propia.
La Covid-19 explica la hecatombe y, particularmente, los ceses de actividad decretados por el Gobierno central para intentar frenar la expansión del SARS-CoV-2. La venta al público se ha limitado a productos de primera necesidad, un sector donde priman las grandes cadenas, y muchos no tienen opción de trabajar de forma telemática.
MUNICIPIO. En la esfera local el municipio pontevedrés se ha quedado en los 5.386 autónomos, un 1,1% menos de los que constaban hace un año. El porcentaje no parece alarmante de no ser porque los expertos del gremio auguran que lo peor está por llegar.
El secretario general de Upta, el vilagarciano Eduardo Abad Sabarís, cree que el balance de abril "terminará igual o peor" que el de marzo, teniendo en cuenta que la evaluación del mes pasado no ha incluido a los autónomos que han solicitado el cese de actividada, que presupone que no serán pocos. "Ante una situación complicada como esta lo que pasará es que , evidentemente, habrá personas que decidan cerrar su negocio, pasar página y esperar a que pase el temporal. La provincia de Pontevedra lo va a pasar mal, porque a nivel de gran empresa los datos ya no iban bien y el sector del mar, que era un sector refugio bastante importante, tampoco está yendo demasiado bien", advierte Eduardo Abad.
DEMANDAS. El secretario general de Upta aplaude la prórroga aprobada por el Gobierno para que las pymes y autónomos puedan presentar hasta el 20 de mayo sus declaraciones y abonar las autoliquidaciones de impuestos. Sin embargo, considera que se trata de "una muy buena opción, pero insuficiente".
Los trabajadores por cuenta propia siguen reclamando una nueva prórroga para que "los impuestos se puedan presentar en el siguiente trimestre del año", y siguen incidiendo en la necesidad de desbloquear otras dos demandas "fundamentales que siguen pendientes de arreglar".
La primera de ellas es la aplicación "de forma definitiva" de una moratoria para el pago de los alquileres de los establecimientos comerciales afectados por las restricciones del estado de alarma, en muchos casos rentas inasumibles cuando los ingresos se reducen a la mínima expresión.
Al mismo tiempo, el secretario general de Upta reitera la petición de "rebajar la cuantía de la pérdida de facturación" para que los autónomos puedan acogerse a las ayudas por cese de actividad, y que en este momento está fijada en el 75%. "Tiene que rebajarse al 50% definitivamente".
IMPUESTOS. Según el Ejecutivo, la prórroga para la presentación de impuestos beneficiará a unos 3,4 millones de contribuyentes cuya facturación no supere los 600.000 euros. No obstante, la moratoria podría quedarse corta vista la previsión de ampliar el estado de alarma al menos hasta el fin de semana del 10 de mayo.
La medida de gracia engloba la presentación de la declaración trimestral del IVA, el pago fraccionado del impuesto sobre sociedades y el IRPF.
El pontevedrés considera que "siempre es positivo que las organizaciones colectivas se sienten con la Administración responsable de sus destinos", pero en este caso subraya que se ha alcanzado "un gran acuerdo, que es la puesta en marcha de la mesa del trabajo autónomo". Un órgano para dialogar "condiciones y soluciones" y para "hacer una descongelación de la economía con la suficiente consolidación para que ningún autónomo se quede en el camino".
