Más de la mitad de los militares de Figueirido no han cumplido los 41 años y el 72% son gallegos

La presencia de los soldados en la rutina de la ciudad es constante durante todo el año, desde la vigilancia de los montes contra el fuego hasta visitas a colegios y asociaciones
Un joven en la exposición de material en la Alameda con motivo del Día de las Fuerzas Armadas. RAFA FARIÑA
photo_camera Un joven en la exposición de material en la Alameda con motivo del Día de las Fuerzas Armadas. RAFA FARIÑA

Una de las máximas de todos los generales que han dirigido la Brilat es su constante preocupación por integrarse con el entorno que les acoge, especialmente con los ciudadanos de Pontevedra. Una implicación que no solo queda acreditada por el movimiento económico sino porque los soldados participan del día a día de la ciudad durante todo el año.

Una de sus participaciones más relevantes (por el incuestionable servicio que prestan) es la vigilancia de los montes durante el verano, en la denominada operación Centinela Gallego, para prevenir y detectar incendios forestales. Un despliegue en el que participan un centenar de efectivos de la Brilat y del Tercio Norte de Infantería de Marina de la Armada y que llega a 33 concellos gallegos.

Pero su conexión con el entorno local se plasma a través de otras actividades más didácticas y lúdicas, como visitas a colegios, actividades deportivas, apoyo con material a instituciones y asociaciones deportivas y culturales, y la partipación de la banda de música de la Brilat en desfiles y celebraciones locales.

No menos llamativo es el despliegue de material que cada año se realiza en la Alameda pontevedresa con motivo del Día de las Fuerzas Armadas, en el que cientos de ciudadanos pueden conocer más de cerca los medios y el personal militar que velan por su seguridad.

Y es que la relación de Pontevedra con las Fuerzas Armadas es longeva y esta tierra ha visto nacer a ilustres protagonistas de grandes gestas militares de nuestro país. Pero no fue hasta mediados del siglo pasado (en enero de 1966 que nacía en A Coruña y Santiago la entonces denominada Brigada Aerotransportable (Briat), dentro de las Fuerzas de Intervención Inmediata.

Pero la entrada en vigor del Plan de Modernización del Ejército de Tierra (Plan META), supuso un cambio de modelo muy importante, primando la concentración de efectivos frente a los intereses políticos, y Figueirido fue el destino elegido para la unidad, pese a las ampollas que la decisión levantó en la capital herculina, con su alcalde Paco Vázquez al frente de la revuelta.

Sin embargo, la decisión estaba tomada y en 1987 se trasladó a la Base General Morillo de Figueirido el grueso de la unidad, que al año siguiente incorporó al Regimiento de Infantería Príncipe nº 3, acuartelado en Siero (Asturias).

RECHAZO INICIAL DEL BNG. Las fuerzas vivas de la ciudad acogieron con los brazos abiertos a los recién llegados. En el Concello se llevó a cabo una votación y el apoyo fue total por parte de los Independientes de Rivas Fontán, la Alianza Popular de Cobián Salgado, el PSOE de Roberto Taboada y el CDS de Manuel Campos Villarino. Solo hubo un partido y un concejal que no apoyó aquel traslado: el BNG de Miguel Anxo Fernández Lores, quien justificó su oposición en base a su filosofía antimilitarista.

Con el paso del tiempo, la Brilat se ha convertido en una de las unidades de mayor prestigio y reconocimiento, no solo dentro del Ejército español, sino en la esfera internacional.

De las 2.200 personas que integran el personal (militar y civil), el 27% tiene entre 18 y 30 años y el 54% oscila entre los 31 y los 40 años, lo que da fe de su juventud. Solo el 19% superan ya la cuarentena.

En cuanto a su origen, la inmensa mayoría (el 72%) de los soldados son gallegos, de los que casi la mitad (el 42%) pertenecen a la provincia de Pontevedra.

Comentarios