Las mujeres del municipio capitalino están llamadas a movilizarse el próximo 8 de marzo, con motivo del Día Mundial de la Mujer Trabajadora. Las ediciones de los últimos dos años marcaron un punto de inflexión en las reivindicaciones de género gracias a un seguimiento masivo de la convocatoria de huelga y este año, pese a coincidir en domingo, está previsto un apoyo multitudinario.
La dimensión de las movilizaciones, unida a una mayor concienciación social y a las políticas de igualdad, están contribuyendo a equilibrar la balanza entre ambos sexos. La gran pregunta es ¿para cuándo una paridad real? Las estadísticas, que dejan la respuesta en el aire, revelan que la desigualdad sigue vigente en muchos ámbitos, empezando por el mundo laboral.
EL PESO DE LOS SALARIOS FEMENINOS ES UN 47% MENOR. La brecha salarial sigue rondando el 30% entre hombres y mujeres de la provincia pontevedresa, pero en términos absolutos la diferencia se ha agrandado. Si el año pasado se hablaba de una disparidad de 4.756 euros anuales (en base a datos de 2017), el total actual (correspondiente al ejercicio de 2018) eleva la cifra hasta los 4.862 euros por año. Dicho de otro modo, pero con otros números. El salario medio anual de las pontevedresas se sitúa en los 15.953 euros anuales y el de los pontevedreses en 20.815 euros, por lo que cada final de mes ellas ingresan en cuenta 405 euros menos (tomando como modelo un contrato con doce pagas).
Otros parámetros para tomar conciencia: según los datos de la Agencia Tributaria, en la provincia hay un 11% más de hombres que mujeres trabajando (198.580 frente a 176.303), pero la distancia salarial es mucho más elevada. Ellos perciben salarios que suman 4.133 millones de euros de euros y ellas sueldos que suman 2.812 millones, un 47% menos. Además, el 37% de las empleadas pontevedresas cobran por debajo del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), mientras que en el caso masculino el porcentaje baja al 25%.
SOLO UN 6,9% OBTUVIERON EL AÑO PASADO UN TRABAJO FIJO. En todas las categorías profesionales las féminas perciben un salario menor al de los varones. Por ejemplo, ambos sexos coinciden en que los servicios personales y de ocio son los peor retribuidos, pero ellas perciben un salario medio anual de 8.033 euros y ellos uno de 11.631.
Al mismo tiempo, ellas ejercen en mayor proporción empleos con peores condiciones laborales. El 30% de las pontevedresas se dedica al sector de los servicios sociales (cuyo salario medio alcanza los 21.819 euros), el 21,8% al comercio (14.400 €/año) y el 16% a servicios personales y de ocio. En cambio, en el caso de los pontevedreses, el 23,5% se dedica al comercio (cuyo salario medio es de 20.124 euros), el 20,5% a la industria (24.407) y el 11,6% a servicios empresariales (16.964). Aparte, de los 433.479 contratos registrados el año pasado en la provincia, el porcentaje de indefinidos fue superior en el ámbito masculino (7,2% frente al 6,9% del sector femenino). Y otro matiz que ayuda a explicar la brecha. El 44% de los contratos a mujeres fueron a tiempo parcial, mientras que en el caso de los contratos masculinos el índice desciende al 21,8%.
PARO DE LARGA DURACIÓN QUE DA PASO A PENSIONES 'LIGHT'. La disparidad salarial tiene continuidad en el desequilibrio en las prestaciones. En el municipio pontevedrés hay un 25% más de mujeres que de hombres en paro (3.213 frente a 2.385) y, además, cabe destacar que el 46% lleva más de un año buscando empleo, lo que se conoce como paro de larga duración (que en el caso de los hombres representa un 37%).
En el terreno de las pensiones también se vislumbran diferencias que nacen de la precariedad y la temporalidad que subyace en el empleo femenino. Según los mismos datos de la Agencia Tributaria, las mujeres de la provincia perciben una pensión de 11.049 euros anuales, 4.819 euros menos que los hombres.
PRESENTES EN UN 30% DE PUESTOS DIRECTIVOS. Algunos estudios recientes (como el informe Women in Business, elaborado por Grant Thornton) concluyen que, tras años de estancamiento, el porcentaje de mujeres directivas ha vuelto a crecer en España situándose en un 30%. No obstante, en la escala provincial y local, en la actualidad, todavía cuesta encontrar a mujeres al frente de grandes compañías. Las cargas familiares siguen lastrando el desarrollo profesional. Habrá que ver qué ocurre el 8 de marzo de 2021.
PLANES DE IGUALDAD. Las empresas con más de 50 empleados están llamadas a elaborar un plan de igualdad para garantizar «la igualdad de trato y de oportunidades» entre mujeres y hombres en la empresa. Las firmas con más de 150 trabajadores tendrán como tope el 7 de marzo de 2020, las de entre 100 y 150 el 7 de marzo de 2021 y las de entre 50 y 100 el 7 de marzo de 2022.
