Norvento se adjudica 128 megawatios en la subasta de los eólicos

La empresa lucense se hace con una parte de los 3.000 MW subastados este miércoles. Los resultados son provisionales, a la espera de la validación de la CNMC
Uno de los parques eólicos próximos a la estación eléctrica de Boimente
photo_camera Uno de los parques eólicos próximos a la estación eléctrica de Boimente

La tecnología eólica se erigió este miércoles como triufadora en la subasta de energía organizada por el Ministerio de Economía con el fin de impulsar el desarrollo de las renovables tras el parón que supuso la supresión del sistema de primas para reequilibrar las cuentas del sistema eléctrico. De los 3.000 megavatios (MW) en liza, 2.979,55 se repartieron para la instalación de aerogeneradores. El principal beneficiario, con 1.200 MW, es el grupo aragonés Forestalia, cuyo propietario, Fernando Samper Rivas, procede del negocio del porcino y logró 300 MW en la puja que el Gobierno desarolló en enero de 2016, en la que consiguió otros 100 de biomasa.

Las siguientes fueron Gas Natural Fenosa, con 667 MW; Endesa, con 540; Gamesa, con 206,45, y la aragonesa Brial Energía, con 237,5. La sexta compañía en conseguir potencia en una subasta en la que compitió con todas las grandes eléctricas fue la lucense Norvento, que se lleva 128,6 MW. Esto le permitirá dar un empujón a los proyectos que tiene pendientes en Galicia, entre los que figuran parques en Mondoñedo. La compañía que fundó Pablo Fernández Castro tiene 330 MW en desarrollo en la comunidad, de los cuales 303 se corresponden con parques del concurso que la Xunta resolvió en 2010, cuya instalación se vio paralizada por el giro en la política energética del ministerio.

Aunque en la convocatoria de este miércoles se adjudicaba potencia con derecho a un incentivo, al igual que en enero de 2016 se resolvió con prima cero debido a la fuerte presión competitiva en un proceso de ofertas a la baja. No obstante, el atractivo de la subasta de este miércoles radica en que los promotores cuentan con un suelo retributivo de 42 euros MW/hora que les garantiza que, si el precio del ‘pool’ en el mercado mayorista cae por debajo de ese nivel, tendrán ese mínimo garantizado.

El compromiso que asumen los adjudicatarios es desarrollar la potencia de aquí a finales de 2019 para no perder los avales de 20.000 euros por MW depositados.

"Nuestra evaluación es positiva, pues la eólica ha salido bien parada", indicaron a AGN fuentes de la patronal eólica de Galicia (Ega), que destacaron que Novento, Gas Natural, Endesa y Gamesa tienen parques en desarrollo en Galicia, lo que implica que "se dan las condiciones para poner las primeras piedras con las que comenzar a construir en la comunidad". No obstante, inciden en que los promotores tienen hasta final de año para asignar la potencia a parques concretos, por lo que llaman a la Xunta a "hacer los deberes" para que los aerogeneradores se instalen en la comunidad. Para ello, demandan la supresión del canon eólico, que supone un sobrecoste, y que se articule un procedimiento "ágil" para actualizar los proyectos de 2010. Y es que han pasado siete años y "las máquinas ya están obsoletas", por lo que tocaría cambiarlas sin que eso implique "empezar de nuevo con la tramitación" de los parques. "Debemos ser competitivos", incide la Ega en referencia a una comunidad que ocupa el tercer puesto en el ránking español con 3.344 MW instalados.

Forestalia precisó que ha firmado un acuerdo con General Electric (GE) por el cual la compañía estadounidense le proveerá los aerogeneradores para instalar los 1.500 MW conseguidos entre las dos subastas. GE materializará el acuerdo apoyándose en sus plantas de fabricación de palas de Ponferrada y Castellón, el centro de excelencia en ingeniería que tiene en Barcelona y en el centro de servicios en As Pontes. Todo indica que toda la potencia se desarrollará en Aragón.

Por su parte, Endesa anunció que invertirá unos 600 millones, confirmando que algún proyecto recaerá en la comunidad gallega.

Frente a la satisfacción del sector eólico, la Unión Española Fotovoltaica avanzó que impugnará la subasta ante la Comisión Europea al no haber logrado potencia.

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