"Nuestros pacientes esperan resultados adecuados, no piden cambios radicales"

Hablamos con María Jesús Álvarez, jefa del Servicio de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética del Hospital Quirónsalud Miguel Domínguez

María Jesús Álvarez. DAVID FREIRE
photo_camera María Jesús Álvarez. DAVID FREIRE

¿Cuál es el perfil más habitual del demandante de operaciones de estética?
Personas de entre 25 y 60 años, la mayor parte mujeres, con ganas de verse mejor, con objetivos claros y estudiados, y con información de las diferentes opciones terapéuticas. Son pacientes que esperan resultados adecuados a sus preocupaciones y que no piden cambios radicales ni resultados imposibles.

¿Qué porcentaje son mujeres y qué porcentaje son hombres?
Continuamos manejando un porcentaje masculino menor, sobre el 15% o el 20%, pero notamos que va en alza cada año. Es difícil de explicar, pero hay meses en que la cirugía masculina llega al 40%.

La facial es la operación combinada más habitual. ¿Cómo es el postoperatorio? ¿Se tarda mucho en regresar a la vida cotidiana?
La recuperación depende de múltiples factores, como las zonas intervenidas o las características de cicatrización. Podemos simplificar explicando que las suturas en la cara se retiran en cinco días y que los hematomas suelen persistir unos diez. No obstante, las técnicas de maquillaje permiten la reincorporación a las actividades cotidianas una vez que el paciente se encuentra bien, es decir, en una semana en cirugías superficiales y dos en las más profundas. Aún así, los resultados se irán definiendo en los tres meses siguientes.

Dentro de las cirugías combinadas corporales, ¿qué es más común, el aumento o la disminución de pecho?
Los problemas de las mamas suelen ser debidos a los postpartos en mujeres de más de 30 años, que requieren renovar tanto la forma como el volumen de su pecho. En este caso se realiza una mastopexia o elevación de la glándula, bien sea añadiendo un implante o bien reduciendo este y recolocando la glándula restante para conferir firmeza y recuperar la posición juvenil. En mujeres jóvenes es más frecuente la necesidad de aumentar el tamaño del pecho, pues suele tratarse de pacientes delgadas en las que la glándula no se ha desarrollado, y esto lo podemos hacer con implantes o lipotransferencia. Pero en cirugía mamaria no nos debemos olvidar de la masculina, pues la ginecomastia (agrandamiento de las glándulas mamarias) es una patología con alta prevalencia en hombres, especialmente de 30 a 60 años. Muchas veces es hereditaria y representa el mayor porcentaje de las cirugías masculinas corporales.

La lipotransferencia también entra dentro de las intervenciones comunes, ¿dónde se suele depositar la grasa extraída?
Las aplicaciones de la grasa propia son múltiples. En facial permite corregir desde cicatrices hasta deterioros, y no solo los causados por envejecimiento, sino también por enfermedades que han provocado una pérdida de peso o de grasa. En cirugía corporal también permite corregir cicatrices, remodelar el pecho, los glúteos, las pantorrillas... y con el beneficio de liberar la zona donante de su grasa excedente.

Hace un año decía que cerca del 10% de las cirugías de estética son irrealizables, ¿lo mantiene?
Es una tónica en nuestro quehacer diario... es el mismo porcentaje de pacientes a los que recomendamos buscar a sus problemas una solución diferente a la cirugía, ya que sus problemas seguirán siendo los mismos una vez realizada la intervención. Si el objetivo de la cirugía no está claro y las expectativas no son reales, será mejor reeducarnos para conseguir los logros de una forma distinta. La cirugía nos puede ayudar en muchos aspectos, pero no es una varita mágica y no va a poder conseguir imposibles; es algo que un buen profesional te recordará siempre.

¿Y siguen llegando pacientes con fotos de famosos a los que quieren parecerse?
Eso ya no ocurre. Hoy los pacientes quieren asegurarse de que el tratamiento no les va a hacer parecidos a ‘ese famoso que ha salido en prensa que parece un muñeco de cera o un esperpento’. Pueden presentar alguna foto indicativa de sus gustos, pero están dispuestos a dejarse aconsejar para decidir qué es lo mejor para cada cual.