Un nuevo apagón generó este martes "importantes" pérdidas en la hostelería pontevedresa. El corte del suministro se produjo a las dos menos diez de la tarde, la hora punta para el sector. De hecho, muchos bares y restaurantes de la zona vieja tuvieron que interrumpir el servicio de comidas y derivar a sus clientes a otros establecimientos porque se habían quedado sin luz.
La avería no solo afectó al casco histórico y a su área de influencia, sino también a barrios como el de Campolongo y la zona de Orillamar. Hasta este punto se desplazaron distintos equipos técnicos vinculados Naturgy (la antigua Fenosa) para tratar de buscar el origen del fallo, que en un primer momento se situó en la subestación de Lourizán. Entre estas empresas auxiliares estaba Elecnor.
Responsables de la compañía eléctrica confirmaron a este periódico que el daño en el sistema provino de una línea subterránea en Pardo Bazán, una calle del centro que está conectada a Arcebispo Malvar. Los usuarios afectados ascendieron a 1.432.
El restablecimiento de la línea se hizo de forma gradual. Pasadas las tres y media de la tarde, Naturgy había repuesto el servicio a 564 clientes. Cinco minutos más tarde ya solo quedaban 469 sin luz. La avería quedó totalmente subsanada a las 17.31 horas.
Este no es el primer apagón que sufre Pontevedra este verano. El Concello emitió una queja ante la empresa distribuidora el pasado mes de julio tras varios fallos en el sistema en el centro de la ciudad. Aquella reclamación, que también hizo llegar a la Xunta, instaba a Naturgy a revisar todas sus instalaciones para evitar futuros problemas.
