Medio centenar de ciclistas de todas las edades se congregaron este domingo en la Alameda de Pontevedra para participar en una nueva ruta dominical que les condujo hasta la playa de Lourido en una jornada festiva. La actividad, propuesta por el colectivo Pedaladas, sirvió para fomentar el empleo de la bicicleta como herramienta para el ocio saludable y como medio de transporte, en un día en el que, por momentos, volvió a la memoria el trágico accidente ocurrido en Samieira hace escasas fechas, saldado con el fallecimiento de Jorge Vázquez mientras practicaba su deporte favorito.
La actividad sirvió para fomentar el empleo de la bicicleta como herramienta para el ocio saludable y como medio de transporte
TRECE KILÓMETROS. La ruta atravesó el puente de A Barca y los organizadores contaron con la colaboración de efectivos de la Policía Local de Poio, que escoltaron al grupo desde el viaducto que une Poio y Pontevedra hasta que abandonó la PO-308, en la rotonda que conduce a la AP-9 y al vial de las playas.
El secretario del colectivo Pedaladas, Enrique Pérez, ejerció de guía cultural para los participantes en el evento. Así, el responsable de este grupo explicó con detalle aspectos relacionados con la historia de los enclaves que iba atravesando el pelotón de aficionados a la bicicleta, como el puente de A Barca o la ría de Pontevedra.
La marcha, de unos 13 kiló- metros, concluyó en Lourido. Pedaladas sopesó la posibilidad de ampliar el recorrido hasta A Seca, en Poio, haciendo uso de la nueva senda habilitada en la zona. Sin embargo, tal posibilidad se desechó a causa de las condiciones de esa vía, que no permiten el paso de un grupo tan grande de ciclistas en armonía con las personas que pasean por el camino.
El colectivo Pedaladas continuará promoviendo marchas similares a la del domingo en las próximas semanas con el objetivo de concienciar a todos los ciudadanos de los beneficios del uso de la bicicleta.
