Se planta con una silla en mitad de un paso de cebra y alega que estaba "esperando un taxi"

Los vecinos de Pontevedra cumplieron este domingo de forma mayoritaria con las restricciones impuestas por el estado de alarma decretado para combatir la expansión del coronavirus. Entre los altercados —y las anécdotas— que se sucedieron durante la jornada destaca la de un hombre que, vista la ausencia de vehículos, cogió una silla y se sentó a esperar un taxi en un paso de peatones. Para justificar su actitud, aseguró que llevaba hora y media aguardando a que pasase uno.

Los vecinos llamaron a los efectivos policiales, que instaron al hombre a deponer su actitud y a respetar el confinamiento establecido durante el estado de alarma. 

CONTROL EN A BARCA. Las fuerzas de seguridad realizaron controles para asegurar que la ciudadanía cumple con la orden de permanecer en el interior de sus casas. Así, hubo un dispositivo en el puente de A Barca durante todo el día a la entrada de la ciudad, para verificar que los vecinos solo dejan sus hogares en los casos permitidos, como para ir a trabajar.