La Policía de Poio destapa un fraude de 3.000 euros en la red de abastecimiento

Viaqua requirió la ayuda policial al sospechar de un autolavado ► Además, la Policía halló un contador eléctrico "puenteado" en otro punto del municipio

Destapado un fraude de 3.000 euros en la red de abastecimiento. POLICÍA DE POIO
photo_camera Se investiga a dos personas por un fraude de 3.000 euros en la red de abastecimiento. POLICÍA LOCAL DE POIO

Agentes de la Policía Local de Poio investigan a dos personas con residencia en el municipio por presuntos delitos de defraudación de fluido, uno de agua y otro de electricidad, una figura de delito leve incluida en la reforma del Código Penal aprobada en 2015.

Este delito recoge los casos típicos de personas o negocios que "enganchan" sus instalaciones a la luz o al abastecimiento de agua de modo clandestino y sin pagar a la suministradora. Es el caso de uno de los vecinos de Poio, al que, hace aproximadamente un mes, tras investigar un incendio en el término municipal, descubrieron realizando este tipo de fraude.

Los agentes descubrieron que una segunda vivienda estaba conectada de forma ilegal al contador de corriente de la casa incendiada mediante un "puenteo".

Tras hallar esta evidencia se requirió a la empresa eléctrica correspondiente, para realizar una inspección en el inmueble.

Posteriormente, se investigó al titular de la vivienda por un presunto delito de defraudación de fluido eléctrico.

Además, esta última semana la empresa concesionaria de agua del Concello de Poio solicitó la colaboración de la Policía Local para realizar una inspección de un centro dedicado a la limpieza y lavado de coches en pleno municipio.

Los agentes locales, en compañía de técnicos de la empresa Viaqua, pudieron averiguar que el local estaba conectado ilegalmente a la red de agua desde hace aproximadamente tres años. Así, la cuenta de este fraude al servicio público asciende a 3.000 euros.

Una vez constatados los hechos, se procedió a investigar al propietario del inmueble, en este caso por un presunto delito de defraudación de agua.

Como el hombre tenía el negocio arrendado, además también está siendo investigado por un presunto delito de estafa, ya que el presunto defraudador sí cobraba el agua consumida a la persona que regenta actualmente el negocio.