Pontevedra acoge desde el martes la vista oral por el doble filicidio de Moraña

El juicio seguirá durante varios días bajo el formato de tribunal popular ►El fiscal pide una pena inédita en España: prisión permanente
David Oubel, accediendo a los juzgados de Caldas de Reis
photo_camera David Oubel, accediendo a los juzgados de Caldas de Reis

La Audiencia Provincial de Pontevedra acogerá a partir del próximo martes (12.00 horas) las sesiones de la vista oral en las que se juzgará a David Oubel, supuesto autor del asesinato de sus dos hijas en su domicilio de Moraña durante el verano de 2015. El tribunal de la Sección Cuarta será el que coordine un plenario que se celebrará bajo el formato de jurado popular. Serán, pues, personas alejadas de la Administración de Justicia quienes determinen la responsabilidad de un crimen que conmocionó a toda la sociedad española en su momento. Además, se da la circunstancia de que será la primera vez en la que, sobre un estrado, un representante de la Fiscalía solicite para un procesado la pena de prisión permanente revisable, la más severa de cuantas se han dictado en el país en el período democrático.

POSTURAS ENFRENTADAS. El representante del ministerio público en el caso, Alejandro Pazos, acusa a David Oubel de dos delitos de asesinato cualificados por la alevosía y agravados por el hecho de que las víctimas (sus hijas) eran menores de 16 años, por lo que solicita la imposición de la pena de prisión permanente revisable. La misma condena es la que solicita la acusación particular. Por otra parte, la representación legal del procesado alega la eximente completa de trastorno mental transitorio, entendiendo, por lo tanto, que debería quedar absuelto de todos los delitos que se le atribuyen.

LAS CLAVES. Las claves de la vista oral que comenzará el martes en Pontevedra no tendrán que ver con el desarrollo del crimen, pues parece acreditada la autoría del mismo mediante la gran cantidad de pruebas que aportó la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil en su momento.

El mayor interés residirá en los informes periciales y en la capacidad que tengan las partes a la hora de convencer al tribunal popular acerca de la supuesta enfermedad mental del procesado que alega la defensa, circunstancia que rechazan los forenses del Imelga.