La sobrecarga laboral de Benestar Social ha obligado al Concello a realizar movimientos internos entre su plantilla para reforzar este servicio, al que se incorporarán tres nuevas trabajadoras.
La resolución, publicado el pasado 31 de marzo en el tablón de anuncios del Concello, se produce como consecuencia directa de la "situación excepcional motivada pola Covid-19".
El dictamen fue aprobado por la Xunta de Goberno local y ha sido autorizado por la edil de Persoal, Carmen Fouces. El objetivo es que este departamento, que ha visto intensificada su labor, mantenga su capacidad de atención a las personas más vulnerables del municipio la alerta sanitaria.
