Pontevedra refuerza la presencia de las patrullas 'anticovid' por sus calles

La Policía Local combina los servicios a pie, en moto y en coche para que la ciudadanía cumpla con las normas sanitarias
 
Dos agentes de la Policía Local de Pontevedra, ayer, en la Praza da Peregrina. BEATRIZ CÍSCAR
photo_camera Dos agentes de la Policía Nacional de Pontevedra, este jueves, en la Praza da Peregrina. BEATRIZ CÍSCAR

"Al principio de la pandemia había mucho estrés. Sobre todo por el miedo a contagiar a la familia. Yo me desnudaba antes de entrar en casa y me duchaba antes de entrar en contacto con los míos. Ahora estamos más tranquilos", explica José Luis Serantes, que trabaja como policía local en Pontevedra, que avisa. "Más tranquilos sí, pero no podemos bajar la guardia".

José Luis es uno de los agentes que vigilan que los ciudadanos cumplan las normas sanitarias para evitar contagios. El refuerzo de estas patrullas, en las que el Cuerpo Nacional de Policía también participa de forma activa con operativos propios, se produce en pleno auge de infectados en el área sanitaria.

Diego Gil, Policía Local: "La mayor parte de los ciudadanos se comporta bien, cumple las normas y lleva la mascarilla puesta"

Desde que la Xunta hizo obligatorio el uso de mascarillas, una medida que entró en vigor el pasado 19 de julio, la Policía Local ha interpuesto nueve denuncias en Pontevedra. Muchas de ellas fueron a vecinos o visitantes que no llevaban puestos estos protectores.

"La mayor parte de los ciudadanos se comporta bien, cumple las normas y lleva bien puesta la mascarilla", asegura Diego Gil, compañero de José Luis. "Nuestro deber es advertir al ciudadano de que debe ponérsela", explica mientras él y su compañero, que en diciembre cumplirán 15 años de servicio en el cuerpo municipal, controlan la zona de la Praza da Peregrina, uno de los lugares con mayor tránsito de la ciudad.

José Luis Serantes, Policía Local: "Al principio había mucho estrés. Sobre todo por miedo a contagiar a la familia. Ahora estamos más tranquilos"

OCIO NOCTURNO. En menos de tres minutos, ambos agentes advierten a un hombre de mediana edad que iba sin protector y que justificó su situación por cuestiones médicas; advierten a un joven con la mascarilla bajada, que se disculpa porque iba con un cigarro de liar en la mano e iba fumando, e indican la dirección de una tienda y de las oficinas del DNI tras ser consultados por dos vecinos.

Las patrullas policiales no solo se realizan a pie, sino también en moto y en coche. Durante los próximos fines de semana, los controles harán especial hincapié en el terraceo y en el ocio nocturno, principalmente en el casco histórico de Pontevedra.

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