Este fin de semana se hacía público que un sacerdote de la iglesia Saints Peter and Paul de Pearl River, Louisiana, había sido sorprendido manteniendo sexo en el altar con dos dominatrix. Fue un feligrés el que, al ver luz en el templo fuera de su horario, decidió acceder a la iglesias, viéndose sorprendido por la escena: el cura, Travis Clark, estaba manteniendo relaciones sexuales en el altar con dos mujeres con botas de cuero altas y corsés. Este testigo filmó lo sucedido y puso los hechos en conocimiento de la Policía, que detuvo a los tres implicados.
Ahora, a través de un vídeo, el arzobispo de Nueva Orleans, Gregory Aymond, ha reaccionado ante el suceso diciendo del párroco que "su comportamiento obsceno fue deplorable y su desecración del altar de la iglesia fue demoníaca". "Estoy enfurecido por sus acciones", añadía Aymond, que ha anunciado que consagrará un nuevo altar de forma inminente tras ordenar "quitar y quemar" el anterior.
