Lo que pretendía ser una fotodenuncia de la precariedad de un Centro de Saúde de la comarca en las redes sociales acabó costando un conflicto y la posible erradicación de un baño del personal del mismo consultorio.
Sucedió en Barro, en donde Prosagap se hizo eco de una foto en la que se veía un almacén de medicamentos y material del centro médico que se había instalado en un cuarto de baño del personal. El sindicato difundió la imagen pidiendo mejores condiciones para material y trabajadores, y el alcalde de Barro, José Manuel Fernández Abraldes, aclaró que la situación era conocida, así como otras limitaciones de unas instalaciones de más de 40 años de antigüedad para las que se pide un recambio en todas las reuniones con responsables del área sanitaria.
La respuesta a la queja no tardó en llegar, puesto que responsables del Sergas y el personal retiraron las estanterías que permanecían atornilladas al cuarto de baño el lunes. Según indicó el alcalde, José Manuel Fernández Abraldes, estas estanterías tienen en la actualidad otra ubicación distinta, "a que os profesionais consideraron oportuna".
Sanidade añadió que, "aínda que o inodoro permanecía selado, vai ser retirado para que haxa máis espazo no almacén". Y eso es lo que intentó este martes un responsable de mantenimiento del Sergas. Pero la decisión no se había comunicado al Concello, cuyos responsables (alcalde y teniente de alcalde) impidieron la retirada. «Como mínimo, que informen ao Concello, que é o titular do inmoble. E despois, que consensúen co persoal», afirmaron, para aclarar que «non imos deixar que retiren o baño sen dar outro espazo alternativo aos traballadores, unha vez que xa se resituara o material sanitario noutra parte».
