La presidenta del Parlamento de Galicia, Pilar Rojo, participó hoy en Santiago en la conmemoración del XX aniversario de la puesta en funcionamiento de las escuelas infantiles Cativos, un acto en el que puso en valor los avances médicos, psicológicos y pedagógicos que cambiaron la atención a los niños en la primera infancia.
Para facilitar la conciliación de la vida personal, familiar y laboral, Pilar Rojo reivindicó la implicación de “todos", tanto en el ámbito personal como en el de las administraciones públicas y de la empresa. Cativos, afirmó, "es un ejemplo de responsabilidad personal en el campo de la colaboración”.
Del concepto asistencial al concepto educativo
La presidenta del Parlamento valoró también los cambios de modelo registrados. “Pasamos de un concepto asistencial, donde se guardaban los niños mientras la familia no podía atenderlos, al un concepto educativo, donde las niñas y los niños son educados, ilustrados y aprendidos en campos que hasta hace poco nadie conocía. Y hoy hablamos de nuevos conceptos educativos como valores, música, juego, lenguas, expresividad y psicomotricidad”.
En esta línea, se refirió a las denominadas competencias zócalo, estudiadas por el Dr. Hubert Montagner, de la Universidad de Burdeos, sobre las que se sustentan todas las demás y que se desarrollan entre los cero y los tres años, la etapa correspondiente a la escuela infantil.
De los cambios sociales registrados en las últimas décadas, la titular del legislativo gallego destacó la incorporación de la mujer al comprado laboral. A su juicio, “una sociedad que prescinde de la contribución femenina a la vida pública es una sociedad amputada, imperfecta, no plena”.
