Marín, Moraña y Cuntis elaboran equipos de protección contra el virus

La donación deO Abeiro a la Praza de Abastos de Marín. CEDIDA
photo_camera La donación deO Abeiro a la Praza de Abastos de Marín.

Las vecinas de Moraña y Cuntis también están aportando su esfuerzo para contribuir en la tarea común de combatir la pandemia provocada por el coronavirus. En el primero de los municipios, los vecinos y vecinas se han volcado para echar una mano durante este tiempo de crisis. Así, un gran grupo de personas voluntarias de la localidad, entre ellas las integrantes de la asociación de mulleres rurais O Menhir, se han organizado vía whatsapp desde hace dos semanas para elaborar en sus casas equipos de protección para donar a los sanitarios del Hospital Montecelo

Lograron fabricar más de 1.000 gorros y medio millar de mascarillas, además de 50 calzas. Todos los equipos fueron elaborados también gracia a la donación de los materiales. El último ha sido de 300 metros de tejido para realizar batas.

Ahora, se encuentran a la espera de que el centro sanitario les aprueben el modelo diseñado para comenzar a fabricarlo. Cuentan con la colaboración de Protección Civil, que se encarga de distribuir material por las casas y hacerlo llegar entre unas y otras. Cecilia Díaz, integrante del grupo, asegura que desde Montecelo están muy agradecidos. "Nos han mandado fotos de las enfermeras bailando la jota con el material que hemos fabricado", señala satisfecha.

En Cuntis, las protagonistas de la acción solidaria son las mujeres del lugar de Cardecide, que usan los materiales que les hace llegar el Concello para hacer mascarillas. Protección Civil repartió 800 en el municipio y 200 en la cooperativa Cobideza. Son de doble tela y disponen de una abertura.

Mascarillas de colores para días grises

La asociación de mujeres O Abeiro entregó ayer, de la mano de Lourdes Santiago, un lote de mascarillas que ella misma elaboró, a los representantes de la directiva de la Asociación de la Praza de Abastos. Una donación que ha sido muy bien recibida por parte de los trabajadores que están sufriendo un descenso de la clientela durante la crisis de la Covid-19. Son «mascarillas de colores para días grises», destacó la presidenta de la asociación Teresa Landín.

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