Las terrazas de los locales de hostelería de la capital volvieron a llenarse en la tercera jornada del puente, aunque con más mesura que en las tardes anteriores, mientras muchos pontevedreses aprovecharon el buen tiempo del domingo para disfrutar de las calles peatonales, Beiramar y la Illa das Esculturas y su renovado parque infantil.
POIO. La Policía de Poio mantuvo durante todo el fin de semana un control activo sobre las zonas de más concetranción turística del municipio, en donde, efectivamente, sí se detectó la presencia de personas llegadas de otras comunidades. Sin hacer el balance definitivo, los agentes contabilizaron diez casos de personas que no pertenecían a la comunidad autónoma y a las que se les pidió la acreditación que les permitiría estar en territorio gallego. En al menos nueve casos, se presentaron justificantes, y solo una mujer procedente de Valladolid no justificó, inicialmente, la causa de su presencia.
Fuentes policiales indicaron que esta persona aún puede alegar que tenía causa justificada para estar en Galicia, una vez que se inicia la tramitación del expediente por infringir el cierre. Localizada en Raxó, estaba acompañada de otra persona que sí acreditó haber acudido a la comunidad gallega por causas laborales. Profesionales autónomos y personas que dicen tener familiares a los que cuidar han sido las principales justificaciones aportadas en los casos detectados en este municipio. "Pode estar habendo picaresca, pero en principio, fiámonos dos documentos que estean correctamente presentados", indicó el jefe de la Policía Local, señalando que, en todo caso, la cifra de personas de otras comunidades detectadas en Poio no había resultado excesiva.
[Playa de Portocelo, en Marín. RAFA FARIÑA]
O MORRAZO. Con un puente marcado por el buen tiempo, las playas fueron él destinos predilectos de vecinos de Marín y de sus visitantes durante todo el fin de semana con decenas de paseantes y deportistas que no perdieron la oportunidad de disfrutar de los arenales estos días.
Entre las incidencias que se registraron, la Policía Local denunció este pasado fin de semana a dos locales de hostelería por no cumplir las normas restrictivas de cierre y de cumplimiento de las medidas. En esta línea, los agentes intervinieron también en dos domicilios, alertados de posibles fiestas, pero que finalmente resultaron ser reuniones permitidas de supuestos convivientes.
Los incumplimientos del toque de queda se repitieron tanto en Marín, donde se interpusieron varias denuncias, como en Bueu, donde los agentes locales interceptaron hasta cuatro personas durante la noche del sábado fuera del horario permitido.
[Ambiente en A Illa das Esculturas. DAVID FREIRE]
O SALNÉS. La alta afluencia de clientes en las terrazas de los bares, la animación y la normalidad son las notas que caracterizaron la jornada de este domingo en los municipios de la comarca de O Salnés. No se escucharon acentos foráneos en A Illa de Arousa, afirmó su alcalde, Carlos Iglesias, aunque en este municipio pudo percibirse que a la habitual presencia de quienes practican deporte en la ría, los que corren y quienes caminan, se sumaron otros que prefirieron sentarse al sol, compartir unas consumiciones y comer en sus restaurantes. La Policía Autonómica y la Guardia Civil se encargaron de realizar los controles e a la salida del puente.
"Nada relevante y todo tranquilo", es el resumen que realizó el responsable de la Policía Local de Sanxenxo, una localidad que registró una notable presencia de visitantes que tuvieron que aguardar para sentarse en torno a una mesa, porque, como era previsible, la demanda superó la oferta. Las estampas del paseo de Silgar, una vez más, son el perfecto ejemplo del tirón de la localidad.
[Hostelería en Sanxenxo. RAFA FARIÑA]
También sus playas, donde algunas personas aprovecharon para pasear por la orilla sin la obligatoria mascarilla. El Concello, por su parte, instó a esperar este lunes para conocer el balance de la actividad durante los tres días del puente.
Las calles peatonales del centro de Vilagarcía (A Baldosa y la Alameda, especialmente) mostraron este domingo una imagen muy parecida a la de los mejores días del verano y también fue notable la presencia de personas recorriendo el paseo que borde la Praia A Concha-Compostela.
En O Grove, el responsable de la Policía Local afirmó no tener constancia alguna de que se hubiese registrado ninguna incidencia, y como apuntó su alcalde, José Antonio Cacabelos, la labor de los agentes se centró en supervisar que se respetasen la normativa en las terrazas y controlar el acceso de vehículos a la localidad, que fue notable. En días anteriores sí se localizó en A Toxa a cinco personas de Madrid sin justificación.
