El día anterior, Garbiñe se había declarado muy satisfecha de su partido contra la china Qiang Wang, en el que había salido –dijo– "a morder".
Frente a Van Uytvanck, número 59 del mundo, que venía de eliminar a la checa Petra Kvitova, la española empezó haciendo lo mismo, con golpes duros dirigidos a un lado y a otro de la línea de fondo, que la belga no acertaba a contrarrestar.
Con un parcial de 3-0 para la española el partido hubo de ser interrumpido por el viento y la lluvia que trajo el tifón Nepartak.
Una hora y 40 minutos después, el partido se reanudó y a Garbiñe le costó entrar en juego. Del 3-0 a su favor se pasó al 3-3 y al 4-4, antes que recuperar el toque para apuntarse la manga por 6-4.
En la segunda, Muguruza logró un break en el cuarto juego (3-1), su rival fue perdiendo la confianza y el partido concluyó rápidamente con un parcial de 6-1.
La española se enfrentará en cuartos de final a la vencedora del partido entre la croata Donna Vekic y la kazaja Elena Rybakina.
Por su parte, la castellonense Sara Sorribes, protagonista de la primera gran sorpresa del torneo olímpico de tenis al dejar fuera a la número uno, la australiana Ashleigh Barty, cayó eliminada este martes en octavos de final frente a la rusa Anastasia Pavlyuchenkova.
La número 18 del ránking mundial dominó a Sorribes a lo largo de todo el partido y se impuso por 6-1 y 6-3 en poco más de hora y media.