Juan Saavedra: "Mi objetivo es llegar a la final y luchar hasta el último tiro por la medalla, mejor si es oro que plata"

Hace tres años se convirtió en el primer español en sellar su pasaporte para los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020 y ahora, en la capital nipona, ya piensa en subirse al podio
Juan Saavedra. RFETO
photo_camera Juan Saavedra. RFETO

Logró la medalla de plata en posición tendida 50 metros en los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 y ahora Juan Saavedra (Pontevedra, 1973) quiere repetir hazaña, esta vez con la vista puesta en el oro. El tirador, que logró la plaza para sus quintos Juegos tras ganar la Copa del Mundo de Chateauroux en 2018, competirá en carabina de aire tendido 10 metros R3 y en carabina libre tendido 50 metros R6. El próximo 1 de septiembre es el día señalado en el calendario para que Saavedra inicie su andadura en los Juegos Paralímpicos de Tokio.

Hace tres años que logró su plaza en Tokio tras ganar el oro en la Copa del Mundo de Francia, ¿qué siente ahora que está a pocos días de la competición?
Tranquilidad. Al final son tres años, incluso hemos tenido uno de añadido para entrenar más. Así que bien, tranquilo. Veremos cuando llegue la competición, entrarán entonces los nervios típicos.

¿Cómo ha sido la preparación estos años?
Al conseguir la plaza tan temprano, he tenido bastante tiempo para preparar estos Juegos, y he estado siempre enfocado en eso. Tuvimos que cambiar un poco la preparación por el Covid. Hubo mucho entrenamiento en casa, con el simulador de tiro, que también viene bien porque a veces es bueno parar. La preparación que he llevado, en sí, es buena. Y los entrenamientos que he estado haciendo hasta ahora en la Blume han ido muy bien. Ahora todo eso hay que traducirlo en que en la competición se vea igual.

"Yo no lidio con el estrés y la presión, aprendo a competir con ellos porque no desaparecen"

El coronavirus impidió que pudiera competir en 2020, ¿cómo le afectó esto?
Ni yo ni nadie pudo competir, realmente. Tuvimos el parón de las competiciones pero a la vez ganamos en entrenamientos. En un año normal, que estás todo el tiempo compaginando competición y entrenamientos, a veces pierdes un poco la perspectiva del entrenamiento, sobre todo de la parte técnica. En ese sentido, yo creo que he ganado, porque técnicamente estoy bastante mejor que hace un año. Yo en 2020 me preparé igual que si tuviera los Juegos en las mismas fechas, además creo que coincidió con cuando salimos del confinamiento y se pudo volver al campo de tiro.

Además, fue un año muy duro a nivel mental.
Estar encerrado no ha sido fácil para nadie, sobre todo la incertidumbre de no saber si se iban a hacer los Juegos Olímpicos o no. Un día te decían que sí, al día siguiente las noticias decían que no. Realmente hasta que te has visto aquí subido al avión y ya en los Juegos, no te lo creías. Pero estamos aquí y ahora es echar la pelota a rodar y el partido comienza. Ya no hay vuelta atrás, estoy en modo Juegos y a competir.

Usted lleva 30 años en este deporte, una disciplina en la que a diferencia de otras la edad beneficia.
Sí, no es un deporte que la edad te perjudique. Tampoco ser mayor te hace mucho mejor, pero en algunos aspectos sí. Lo ideal sería tener 30 con la experiencia de los 47, pero eso no sucede. En la competición de 10 metros no pasa tanto, está más enfocada en los jóvenes porque al ser en galería cerrada las condiciones atmosféricas no te influyen para nada. Pero a 50 metros sí, que haya viento o no, luz o calor, que llueva, cambia muchísimo. Realmente cuando las condiciones son malas ves que los tiradores que ocupan las primeras posiciones son los que llevan ya muchos años.

"Viendo los resultados y las puntuaciones, creo que es el mejor momento de mi carrera"

Las condiciones meteorológicas influyen mucho y es ahí donde la experiencia se hace notar.
Sí, totalmente. Además tienes que hacer algo para lo que supuestamente no entrenas, que es no apuntar al centro. Entonces eso en tu cabeza es un acto de fe. En vez de apuntar justo al centro debo hacerlo a la derecha, pues a un nueve o a un ocho. No es tan sencillo porque al final son decisiones que tomas en décimas de segundo.

Son sus quintos Juegos Olímpicos, ¿qué significa esto para usted?
Pues que soy mayor. Llevo ya muchos años dando guerra. Lo tomas de otra manera. Cinco Juegos son más experiencia, más saber donde estás y ser consciente de realmente cómo es la competición, cómo prepararlo. Los Juegos son cada cuatro o cada cinco años. Tienes esa oportunidad y ese día tienes que estar perfecto. Con el tiempo terminas cogiendo la experiencia de la competición.

Sí, pero esa presión y ese estrés del día de los Juegos en el que no puede fallar, ¿cómo lidia con ello?
Es que no lidio con eso, está ahí. Tienes que aprender a competir bajo ese estrés y esa presión, porque no van a desaparecer. No tenemos una fórmula mágica con la que de repente digamos "estoy súper tranquilo". Todos nos seguimos poniendo nerviosos. Lo bueno es saber que todos estamos con las pulsaciones por las orejas. Lo asumes y compites bajo esas circunstancias, que es la parte complicada.

La ausencia de público, ¿resta emoción a estos Juegos o hace que sean especiales?
La verdad es que es una pena, pero al final desde el punto de vista de la competición, como deportista, el público es algo que está ahí pero del que realmente no eres consciente cuando estás compitiendo. Estás centrado en lo tuyo. Lo notaremos en el momento del último tiro.

El resto de protocolos a seguir, ¿varían mucho la dinámica de competición en el tiro olímpico?
El tiro es un deporte en el que no tenemos en absoluto contacto físico por una cuestión de seguridad, porque al final estás compitiendo con armas. Entonces mantener las distancias es algo que está súper controlado. Si por algo te pueden descalificar es por falta de seguridad. Es algo que ya tenemos muy interiorizado. A parte de eso, tendremos que llevar mascarilla y mantener más las distancias que lo que hacíamos antes, pero no es algo que nos vaya a influir demasiado.

"Si lo hago como sé hacerlo y al nivel que estoy tirando, la lógica dice que puedo competir por las medallas"

Llega con muy buenas sensaciones a estos Juegos. ¿Se ve favorito para subirse al podio?
La sensación de favoritismo nunca termino de tenerla, porque al final muchos de mis compañeros son tan buenos como yo. Pero sí que tienes la confianza de que haciendo las cosas bien y como las sabes hacer, las posibilidades son más altas. Podemos estar ahí en la pelea cinco o seis, y creo que sí estoy incluido entre ellos. ¿Que eso te garantice una medalla? Ya lo veremos. El día 5 volvemos a hablar y te digo.

Entonces, como objetivo principal al nivel que se encuentra, ¿aspira a una medalla?
Sí. Mis aspiraciones siempre están. Se trata de hacerlo bien y luchar por las medallas, sino al final no habría competido como tengo que hacerlo. Si realmente lo hago como sé hacerlo y al nivel que estoy tirando, la lógica dice que podría estar compitiendo por las medallas. Ahora, ojalá supiera lo que va a pasar en 15 días. Estamos entrenando y la preparación está enfocada a eso. Mi planteamiento en estos Juegos no es ir a participar y ver lo que sale. Y también es duro, porque realmente el objetivo que tienes es meterte en la final y luchar hasta el último tiro por conseguir la medalla. Y si es de oro mejor que de plata.

¿Llega en el mejor momento de su carrera?
Si analizo fríamente los resultados, los entrenamientos y las puntuaciones que estoy haciendo, sí. Viéndolo desde el exterior, yo di-ría "ese es uno de los que va a estar luchando por las medallas". Pero eso no garantiza nada. No te puedes confiar. Estoy siempre con el punto de alerta de "tranquilo, hay que seguir con los pies en la tierra y trabajar como hasta ahora". No hay que pensar más allá, ir tiro a tiro e intentar hacerlo lo mejor posible en cada uno. Al final esto no es una competición de 60 tiros y luego la final, son 60 competiciones de un tiro y tienes que estar al 100% cada vez que compites.

Pensando ya en horizontes lejanos, ¿se siente con fuerza para pelear por una plaza en París?
Sí. París está muy cerca, ya le hemos quitado un año. De hecho para nosotros -los tiradores olím-picos- el año que viene, en Francia otra vez, ya se vuelven a repartir plazas. Tenemos el Campeonato del Mundo en Al Ain que también se reparten plazas. Es un poco atípico, porque normalmente tienes un año sabático y te lo tomas de otra manera, pero con esto del Covid al final los Juegos de París están ahí. Va a ser competición casi permanente. Dentro de un año, malo será que no consigamos plaza.

Apoyo institucional y mediático

"Solo se habla de los deportes minorizados en los Juegos"

El apoyo institucional y mediático es fundamental para disciplinas minorizadas como el tiro olímpico, que buscan un altavoz que ponga en valor el esfuerzo y el sacrificio de los deportistas.

El tiro olímpico es una disciplina que reclama más ayudas y en la que entrenar y competir supone un gran gasto.
Sí. De por sí, lo que es el tiro olímpico no es una disciplina cara. Pero al final, todos los deportes acaban siéndolo. Llega un punto en el cual competir a un cierto nivel es caro. En natación te compras un bañador, que cuesta 20 euros, y con eso puedes nadar. Pero si quieres competir necesitas un bañador en concreto que te cuesta 200 euros y que vas a utilizar tres veces. Al final, llegado a un cierto nivel es caro. Evidentemente la munición que utilizo en mi caso es cara, porque tiene que ser una munición buena, ya que el nivel exige eso. Sino el deporte en sí mismo no es caro. 

Claro, pero en su disciplina la munición se gasta en grandes cantidades en los entrenamientos...
Sí, la munición es fundamental y sobre todo que sea muy buena. Realmente en el entrenamiento es cuando ves el nivel que tienes. No es barata, 50 tiros deben de ser como 18 euros. Cuando vamos a entrenar, menos de 500 tiros no hago, son más de 100 euros que se van entrenando. Para un tirador deportivo normal no lo necesitas, pero en la élite sí. Es la parte cara, después la carabina también cuesta pero te dura hasta siete años, como es el caso de la mía actualmente.

En este sentido, ¿le gustaría ver más apoyo de las instituciones e incluso de los medios?
Sí, pero en general a todos los deportes. Al final los deportes minorizados están en el altavoz sólo durante los Juegos Olímpicos y Paralímpicos. Quizás en España funciona porque somos potencia en fútbol, baloncesto, y opacan el trabajo de otros deportes. Es entendible, lo asumes porque es lo que hay. No es algo que dependa de nosotros, nuestro trabajo es hacerlo lo mejor posible, entrenar y el resto depende de los periodistas, de que la gente conozca los deportes, que se involucre. Yo no soy muy de la teoría de lo que demanda la gente, porque si el público no lo conoce, ¿cómo va a demandarlo?

Trabajo y dedicación

"Este deporte te da fuerza mental ante situaciones complicadas"

Le amputaron parte de su brazo izquierdo con 17 años a causa de un cáncer. Entonces, Juan Saavedra decidió aferrarse al tiro olímpico como ejercicio de superación. Ahora llega a sus quintos Juegos Paralímpicos tras años de trabajo, sacrificio y conciliación.

Se enganchó muy joven al tiro adaptado, tras una amputación en su brazo izquierdo por un cáncer, ¿por qué esta disciplina y no otra?
Al final no es algo que elijas o no, simplemente me gustó. No sé si tendría más aptitudes para otra o menos. Cuando empecé no me planteaba el hecho de competir o estar en unos Juegos, lo practicaba como una diversión, un deporte de superación, de cada día intentar hacerlo mejor. Y era un poco mi objetivo, ir paso a paso, si ahora hago esto mañana intento hacerlo mejor, y así todos los días. Y al final eso te lleva a estar aquí.

¿Qué ha aprendido del tiro olímpico para su día a día?
Tranquilidad, calma. A la hora de afrontar las situaciones ver las cosas con perspectiva, analizar y actuar en consecuencia. Esa fuerza mental sí que te la da este deporte. No entrar en pánico ante situaciones realmente complicadas porque no te lleva a nada.

En el tiro, se compite contra los rivales pero también contra uno mismo.
Sí,  es  un  deporte  bastante frustrante, porque siempre te quedas con la sensación de que lo podías haber hecho mejor. No hay un límite en el cual digas que está bien. Siempre tienes ese dilema. Evidentemente compites contra otros, pero que ellos lo hagan mejor o peor no te hace a ti mejor o peor. De hecho no sabes lo que están haciendo los otros. Tiras a ciegas. Al final, cuando te levantas es cuando piensas en cómo estás. Tienes que intentar olvidarte de los demás y hacerlo lo mejor que puedas.

Además de tirador olímpico, trabaja  en  una  consultora eléctrica. ¿Es difícil compaginar el trabajo con el deporte de élite?
Siempre es difícil compaginar el deporte de élite con cualquier trabajo o los estudios. El planteamiento que me hago yo es que al final son muchos años. Tiro los fines de semana, cuando entreno, los viernes por la tarde, en las competiciones... No es fácil compaginarlo pero tampoco es imposible. Lo que requiere es esfuerzo.

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