Sorpresa mayúscula. Uno de los principales culpables del prodigioso último lustro del Peixegalego abandona el banquillo del primer equipo. Así se lo anunció Javier Llorente a los que eran sus jugadores. El motivo: cuestiones de índole personal que hacen que el entrenador milagro deje el equipo al que ha llevado, en dos ocasiones consecutivas, desde la Liga Eba hasta la segunda categoría del baloncesto español.
A las siete de la tarde, antes del comienzo de la sesión preparatoria, el entrenador leonés afincado desde hace casi tres lustros en la comarca de Pontevedra, se reunió con los integrantes de la primera plantilla del club marinense para comunicarle una decisión que días antes ya había transmitido a los dirigentes de la entidad y también a los que había sido sus compañeros del cuerpo técnico.
El relevo de Llorente lo tomará el que hasta la fecha era su principal ayudante, Diego Gómez al que había reclutado desde Ourense después haber coincidido antes como jugadores en el conjunto marinense.
Es una decisión difícil pero creo que es buena para el club y para la plantilla porque puede ser una motivación extra
El técnico explicará este miércoles en profundidad los motivos del adiós al equipo, que no al club ya que seguirá vinculado a la estructura del club realizando funciones de director deportivo, no en vano es una pieza absolutamente clave en el funcionamiento de una entidad que se ha consolidado en un referente del baloncesto gallego.
La confirmación de que su salida es totalmente amistosa es que seguirá en la estructura de la entidad con la finalidad de que el proyecto no se debilite independientemente de la categoría en la que esté el primer equipo.
Llorente lleva en el Peixe desde hace trece años. Primero como jugador y posteriormente como entrenador en diferentes equipos del club. Leonés de nacimiento, a pesar de que ya se considera un pontevedrés más.
Marín es mi casa y siempre estaré vinculado al club, en el futuro ya se verá. Hay que centrarse en lo que queda
Llegó al Marín Peixegalego en 2007 como jugador, procedente del Oviedo Club de Baloncesto y a partir de ahí su vida dio un giro. Esa misma temporada puso punto y final a su carrera como jugador para pasar a formar parte del staff técnico del club marinense, primero como preparador físico y más tarde como delegado de equipo y ayudante. En 2012, después de una exitosa trayectoria en la base del el club, le llegó la oportunidad de ponerse al frente del primer equipo. Otro de los momentos importantes de Llorente como entrenador fue el subcampeonato de España cadete.
Llorente deja al Peixegalego luchando por la permanencia en la Leb Oro, aunque su ya presencia es un éxito para un club que compite mermado por sus recursos con respecto a la mayoría de sus adversarios.
