Relativizar. Una palabra clave en el mundo del deporte, en el que se puede pasar del éxito al fracaso -y viceversa- en cuestión de segundos. Y una palabra que tiene en mente Luismi Areda para tratar de dejar atrás la derrota ante el Unión Adarve del pasado fin de semana (3-0).
"Todas las derrotas duelen y más ahora, cuando el margen de error es menor. Veníamos de una gira de buenos resultados y buenas sensaciones y fue un palo. Pero igual que antes no queríamos que existiese una sensación de euforia, ahora tampoco queremos que sea todo un drama", expresó este miércoles el técnico tras el entrenamiento.
Luismi profundizó sobre qué le pasó a su equipo en Madrid: "Fue un mal día, un mal partido. Estábamos todos mal. Durante el encuentro hicimos cambios, pero no éramos capaces. Hay días en los que las cosas no salen. No te adaptas al campo, al rival ni al calor. No hay mucha más explicación ni debemos darle muchas más vueltas, más allá de ver los errores que cometimos".
Por ello, una vez la derrota ya está consumada, Luismi pide "cambiar el chip" y pensar ya en el próximo domingo: "Va a ser algo parecido a lo de Adarve. Por eso hemos querido cambiar el horario, entrenar en otro sintético..., para encontrarnos unas circunstancias similares. Se trata de ayudar al futbolista e intentar que sea capaz de que se adapte mejor".
Por ello, el PCF entrenó este miércoles en el Municipal de Zacande, que tiene "una superficie donde el balón no rueda tan bien ni bota igual que en Cerponzóns" y este jueves lo hizo en A Xunqueira, donde volverá a ejercitarse el viernes. Todas las sesiones a partir de las 11.30, un horario similar al del partido (12.00 hora peninsular).
Con todos estos cambios de rutina, el club espera que los futbolistas entren mejor al choque en Las Palmas y recuperen las sensaciones que les llevaron a colocarse en play-off hace dos semanas.
Las Palmas B, un equipo en play-out que no pierde en casa desde febrero
El Pontevedra tendrá que medirse este fin de semana a un equipo con una necesidad de puntos similar a la del Unión Adarve. Las Palmas Atlético llega a la antepenúltima jornada de liga en posición de play-out de descenso. El filial amarillo perdió el pasado fin de semana ante el Rápido de Bouzas, justo el equipo que ahora tiene por debajo en la clasificación, a solo tres puntos.
Por tanto, tras su derrota en Vigo, Las Palmas B sabe que todo lo que no sea sumar en su penúltimo partido como local le conduciría a alejarse de los puestos de permanencia directa y, además, podría hacerle caer a posiciones de descenso directo.
Sin embargo, el rendimiento del cuadro insular mejora mucho en el Anexo de Gran Canaria, un campo de césped sintético similar al del Adarve. Los pupilos de Juan Manuel Rodríguez han caído solo en cuatro ocasiones en su feudo a lo largo de todo el curso. En total, suman 25 puntos como locales. Además, en los últimos cuatro partidos no han perdido y ni tan siquiera han recibido tanto alguno en contra. De hecho, ha vencido por la mínima al Coruxo y a la Ponferradina y ha empatado (0-0) contra Fabril y Salamanca.
El equipo viaja el sábado en avión desde Vigo con escala en Madrid
El Pontevedra tendrá que cambiar sus planes habituales para viajar a la isla de Gran Canaria. La expedición pontevedresa partirá el sábado desde la Boa Vila en torno a las 07.00 horas hacia el aeropuerto de Vigo, donde cogerá un primer avión a Madrid.
El aeropuerto de Barajas será el punto de escala del equipo, ya que pocas horas después se subirá a un segundo vuelo que ya dejará a técnicos y futbolistas en Canarias. Para la tarde del sábado está prevista una pequeña sesión de activación en algún entorno urbano.
