Dos de cada diez pazos gallegos están en venta por los efectos de la pandemia

La Federación Galega de Inmobiliarias avisa de que hay más edificaciones "que nunca" a la venta
Pazo A Buzaca, en Moraña. DP
photo_camera Pazo A Buzaca, en Moraña. DP

Con precios que oscilan entre los 180.000 y los 5 millones de euros en función del estado de conservación, los pazos en venta en Galicia proliferan en un escenario en el que correr con los gastos asociados a su mantenimiento, la falta de relevo generacional y la carga fiscal asociada a las herencias hace que muchos propietarios tengan que desprenderse de inmuebles señoriales con siglos de historia. Según los cálculos de la Federación Galega de Empresas Inmobiliarias (Fegein), en la comunidad existen unas 900 casas solariegas catalogadas en el Inventario Xeral de Patrimonio y de este total unas 200 construcciones buscan comprador, esto es, algo más del 22%.

"Hay más pazos que nunca en venta desde que tenemos datos de los mismos", constata Benito Iglesias, presidente de la Fegein, que reclama la habilitación de ayudas especiales para la conservación y mantenimiento de estas edificaciones. La patronal del sector constata que muchos han sido declarados Bien de Interés Cultural (BIC), lo que, en su opinión, supone "una losa burocrática, fiscal y económica demasiado pesada para la mayoría de sus propietarios".

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¿Qué implica la figura del BIC? La Lei de Patrimonio Cultural de Galicia pauta las intervenciones que pueden realizarse en este tipo de edificaciones y en su entorno, en las que primará la conservación de los elementos y características originales. Según el alcance de las obras, en algunos casos será necesario contar con un proyecto de intervención que contendrá incluso documentación históricoartística y una memoria final de ejecución. Así, el reconocimiento como tal por parte del Consello da Xunta implica que la Consellería de Cultura tendrá que autorizar las obras que puedan acometerse.

Quedan al margen aquellas que sean de muy escasa entidad técnica y constructiva, justificadas por el deterioro de los materiales y que requieran de una rápida intervención por suponer una amenaza para su conservación o apreciación, según establece la regulación. No obstante, la normativa también estipula que estos bienes gozarán de "beneficios fiscales" que puedan establecerse a nivel estatal, autonómico o local, que se extenderán a las obras de "mantenimiento, conservación, restauración o valorización".

La Fegein pide ayudas para conservarlos y señala que, si bien antes algunos pazos se vendían para la hostelería, ahora están "en la Uci"

Con la economía de nuevo en situación de crisis por la pandemia, el líder de la Fegein alerta de que, si bien hace unos años "una parte" de los pazos se vendían para dedicarlos a "negocios de hostelería con encanto", en la coyuntura actual estas construcciones están abocadas a "la Uci". "Su alto coste de mantenimiento y una constante rehabilitación y reforma no está nal alcance de muchos propietarios, sobre todo de aquellos que ejercen su propiedad por herencia", señala Benito Iglesias, que apunta a las dificultades económicas para mantenerlos "en óptimas condiciones de conservación".

Entre los ejemplos de inmuebles que están en el mercado, la Fegein recoge una casona en Bergondo a la venta por 3,8 millones de euros. Se trata del pazo de Armuño, una edificación del siglo XVIII, anunciada en el portal Idealista.com. La transacción incluye la parcela de 9.322 metros cuadrados en la que se encuentra el inmueble—que ha sido reformado y dispone de 13 cuartos de baño y otras tantas habitaciones— y varias edificaciones auxiliares, además de 60.966 metros cuadrados de terrenos colindantes.

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La oferta crece y la prueba es que afloran las inmobiliarias especializadas en este tipo de propiedades. Entre ellas figuran Ünique Singular Properties, con oficinas en A Coruña y Vigo, o Aldeas Abandonadas Inmobiliaria, que solo en Galicia tiene en venta 192 pazos y casas señoriales.

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