El Concello de Marín ya cuenta con sus dos primeros centros de compostaje comunitario -de seis módulos- enmarcados en el Plan Revitaliza de la Deputación de Pontevedra en O Sequelo y A Cañota. Después de que el sistema de compostaje individual, una modalidad ofrecida por el Concello en las parroquias rurales y semiurbanas en colaboración con Sogama, tuviese un éxito enorme, el Goberno local decidió apostar también por dotar a la localidad de dos estaciones comunes.
Las personas interesadas en compostar los residuos orgánicos (restos de comida y vegetales) y que vivan a menos de 150 metros del composero o sean usuarias de la huerta urbana del Sequelo, a pesar de que aún no podrán hacerlo de manera inmediata, si podrán apuntarse para participar en la iniciativa tanto en el departamento de Medio Ambiente del Concello de Marín, como en los contactos del propio Plan Revitaliza da Deputación.
Además de crear una lista de espera para que llegado el momento se cite a todas las personas apuntadas, el personal técnico responsable de ambos composteros irá realizando comunicaciones a los vecinos en el momento en el que se vayan dando los primeros pasos para el funcionamiento.
Con la instalación de estos dos centros de compostaje comunitaria de Marín se incorpora al grupo de los llamados Concellos Revitaliza, haciendo que la totalidad de los municipios de la comarca de O Morrazo están involucrados en el plan provincial de la Deputación.
En estos momentos, tanto el concello de Bueu, como el de Cangas, Moaña y Vilaboa tienen ya un importante número de composteros comunitarios y de composteros individuais instalados. De hecho, este último concello está en una fase muy avanzada de implantación del plan, siendo de los pioneros de la provincia.
La intención de la Deputación y del Concello de Marín al instalar el centro de compostaje comunitaria es tratar en el mismo lugar en el que se producen los biorresiduos de varias docenas de vecinos y así evitar que vayan al contenedor verde tradicional, tengan que ser recogidos por el camión y transportados a Sogama para su incineración.
El personal técnico se encargará de supervisar que los vecinos realiza los depósitos de basura de manera correcta y que se tapa este con la cantidad adecuada de estructurante, de realizar las aireaciones, medidas de temperatura e trasvases entre los módulos de maduración, así como de controlar muchos otros parámetros del proceso de compostaje, y vigilar que no se introducen en el compostero elementos que podrían bajar la calidad del futuro fertilizante.
Por parte del Concello, los operarios de la Fundación XXIII trabajarán en las actividades de mantenimiento y cuidado de jardines y zonas verdes, con el objetivo de promocionar la inclusión laboral.
