"Ningún pintor dedicou tanto tempo e esforzo a facer da súa vila natal o principal rexistro da súa obra", prosigue Rozas en A razón dunha existencia, el volumen de 2011 que hace un recorrido por la vida y obra del pintor. Y es que su localidad natal siempre estuvo presente a lo largo de su trayectoria, quedando recogida en parte en las paredes del museo que en la actualidad le da nombre.
El aniversario de su muerte suscita nuevas dudas sobre la puesta en valor de su figura y el futuro de la pinacoteca como un lugar de culto a su obra y una apuesta fuerte por el turismo cultural. "Marín ten un tesouro que non é quen de reivindicar e poñer en valor", destaca Rozas, que hace hincapié en la necesidad de revalorizar el museo, rediseñando el espacio y convirtiéndolo en un lugar destinado únicamente a la obra del artista.
Su papel dentro de la generación de los renovadores del arte gallego en los tiempos de la República le ha valido un puesto entre los pintores más destacados del panorama artístico. "Souberon integrar toda unha serie de linguaxes das vangardas á nosa identidade galega", explica el historiador.
Alejado de tener una visión pública, Torres ha quedado relegado a un segundo puesto. Sin embargo, la calidad de su pintura merece "reivindicarlo en igualdade de condicións" junto al resto de artistas de su generación, en una labor que continúa a día de hoy.
"Cando ven unha efeméride é cando nos poñemos en alerta, pero debe ser un traballo de todos os días", señala Rozas, que recuerda la necesidad de potenciar su obra a través del museo para convertirlo en un lugar educativo y turístico de la comunidad. "Ten que reformularse ao 100 % en torno á figura de Torres" y apostar por su divulgación.
Precisamente bajo la premisa de poner en valor la figura del artista marinense nació el Ano Torres, una fecha que debería haberse celebrado en 2020 y que, ante la crisis sanitaria, se ha prolongado durante este año para continuar con la programación prevista en torno a la obra del pintor.
Coincidiendo además con el 120 aniversario de su nacimiento el próximo mes de junio, el Gobierno local trabaja este 2021 por retomar algunas de las actividades que se quedaron en el tintero con el objetivo principal de dar a conocer la obra del artista entre los vecinos de la localidad.
El Museo Manuel Torres es un recuerdo a su figura y alberga en sus archivos decenas de obras del artista homónimo que comienzan ahora a salir a la luz. En esta línea, el Concello trabaja desde hace meses en la puesta en valor de los cuadros del pintor marinense con la representación elaborada por Torres de Los niños comiendo pasteles de Murillo, restaurada a finales del año pasado y otra en ahora en proceso.
Uno de los pocos hórreos que pintó Torres se encuentra en estos momentos en manos de la restauradora Eva Fontoira, que trabaja para recuperar su estado original tras años de daños por la humedad y que se podrá disfrutar en las próximas semanas nuevamente en las paredes del museo marinense.
Además, con motivo del aniversario de su fallecimiento, el Concello ofrecerá a partir de este martes y hasta el viernes una proyección del documental del año 2000 Pintores da vangarda histórica galega, que se podrá disfrutar en el museo a las 19.00 horas cada día.
